La Portales, una colonia de esencia barrial

Si eres de las personas que no disfruta del todo la globalización, por la homogeneización estética y cultural de las ciudades ( en casi todas las urbes de tamaño medio puedes encontrar las mismas tiendas transnacionales, por ejemplo), la colonia Portales es para ti.

Esta colonia en tiempos postcolombinos fue una gran hacienda, la Hacienda de Nuestra Señora de la Soledad de los Portales (de ahí el nombre de la colonia) que por estar asentada en el sur es una de las zonas más húmedas y por lo tanto, fue una de las más productivas de su tiempo. La urbanización de esta colonia apenas comenzó a darse a inicios del siglo pasado, cuando empezaron a asentarse algunas casonas y vecindades.

Con el tiempo, las antiguas casas y las vecindades (aunque aún quedan varias) han sido derrumbadas para construir zonas de departamentos; pero aunque esto es una tendencia palpable, en el lugar aún predomina el comercio local: decenas de tiendas de abarrotes y fondas familiares se asoman dándole un toque identitario barrial, de comunidad.

Entre las historias encomiables de la zona está que en los límites de esta colonia con la San Simón Ticumac vivió el querido intelectual mexicano Carlos Monsiváis, por cierto, asiduo asistente al mercado de pulgas ubicado en la calle de Rumania, entre las calles Libertad y Santa Cruz. Recordemos que Monsiváis era un inexorable amante de las colecciones y en México pueden encontrarse cosas realmente valiosas en los mercados de segunda mano, sin que los vendedores siquiera tengan idea de ello.

Estos son los lugares más emblemáticos de la Portales:

Parque de los Venados:

Es uno de los sitios de recreación con más tradición de la ciudad. Es un parque muy grande, de más de 95,000m2, con 2 mil 682 árboles de, increíblemente, 39 especies distintas. Fue construido a inicios de la década de los años cincuenta. Está divido por andadores que recorren el parque en 18 prados. Un rincón vívido y reconfortante entre la mancha urbana. 

parque-de-los-venados

Teatro Hermanos Soler:

Es un teatro popular donde se presentan obras gratuitas y eventos culturales. Está asentado a un costado del Parque de los Venados. Debe su nombre a un reconocimiento en honor a ocho hermanos, hijos de actores españoles, que incursionaron en el teatro mexicano impulsándolo notablemente.

hermanos_soler_19jul11_0

Casa de Carlos Monsiváis:

Su casa asentada en esta colonia es famosa porque ahí vivió junto con 13 gatos más. Conocida también por tener un gran buzón por el que cabía incluso una enciclopedia -una de las herramientas más preciadas de Monsiváis fue indudablemente su buzón-. El patio de su casa, en forma de L, es un rincón en el que muchos de los que pueden visitarla se inspiran y reconfortan.

monsivais2

Zona arqueológica de Mixcoac:

Es un vestigio de un centro ceremonial prehispánico dedicado a Mixcóatl, dios mexica de la caza, que se encontraba a las orillas del lago de Texcoco. Hoy sólo quedan los cimientos, pero aun así puede apreciarse la forma de la construcción desde la acera de enfrente; una simbiosis bastante inusual.

zona arqueologica mixcoac


Comments

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *