Cuando se piensa en las personas del mundo que viven en la calle, especialmente en los llamados homeless o indigentes, a menudo suele creerse que su condición es producto de una decisión propia o un acto de rebeldía silenciosa contra el sistema. Sin embargo, la realidad es que muchos lo hacen porque no han tenido alternativas; numerosos indigentes desearían un hogar pero no hay opciones a las que puedan acudir, por su falta de recursos tanto culturales como financieros.
Sobre este tema, seis ingeniosas chicas en la ciudad de México han creado un proyecto a partir de la elaboración y venta de revistas para ayudar a las personas que buscan salir de su situación de calle. Recientemente subieron su proyecto, Mi Valedor, a Fondeadora y han logrado reunir el dinero para hacer las primeras ediciones de esta revista (más de 300 mil pesos).
La idea de este proyecto es formar parte de la INSP (International Network of Street Papers), que es la red internacional de publicaciones callejeras con presencia en más de 120 ciudades en 40 países. Este sistema está pensado para que los vendedores de las publicaciones puedan quedarse con 70% de la ganancia; es una manera de dar empleo, pero también de hacer textos creativos para la vida cultural urbana y callejera.
La revista Mi Valedor intenta tejer una identidad de la ciudad de México en continuo cambio; el frenesí como motor de una oferta inacabada en temas sociales, culturales y urbanos por ofrecer. Será una documentación de la memoria colectiva de la ciudad, de la cual también forman parte las personas que suelen carecer de un canal de expresión de sus concepciones sobre el mundo, como lo son las personas en situación callejera.
Mi Valedor, además de ser una vía alternativa de empleo a través de talleres, también dará espacio para que los “valedores”, que serán identificados con un chaleco amarillo fosforescente, puedan hacer contenidos gracias a un taller de capacitación que se les ofrecerá periódicamente.
Pensar en la inclusión de las personas menos favorecidas es sencillo con alternativas creativas que, más que un acto de filantropía, generen redes de cooperación y aprovechamiento mutuo. De seguro, como muchos, te has preguntando qué circunda la mente de estos personajes tan enigmáticos: los indigentes. No descartemos que la revista Mi Valedor pueda convertirse en una pieza de arte de las más atónitas, de esas que surgen de la honestidad de una mente libre de pretensiones, tal como la de los indigentes.
Twitter de la autora: @anapauladelatd
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