Tal vez no tenemos a la vista la Torre Eiffel o Les Champs Élysées para degustar una copa de vino suave, pero sí tenemos majestuosas obra arquitectónicas y paisajes urbanos que le parecen gracias a Porfirio Díaz y quizás un poco a la globalización. La Ciudad de México tiene increíbles lugares para pasar la tarde/noche tomando un buen vino acompañado de, tal vez, deliciosas tapas con charcutería fina y un buen queso.
Difícilmente se puede dejar de tomar una copa en las hermosas terrazas de nuestra ciudad donde comer y beber en armonía con el paisaje impecable del cielo resulta un instante maravilloso. Sin embargo, por esta ocasión excluiremos de la lista estos lindos espacios abiertos y nos centraremos en mencionar únicamente los bares y uno que otro restaurante que muy al cliché francés nos ofrecen una estancia bohemia, excéntrica y deliciosa en una mesa sencilla a la luz de la luna o quizás al alumbrado de la calle, porque en efecto, un vino se disfruta mejor cuando nos mimetizamos con nuestro entorno urbano.
El Pecado de Noe
El bar por excelencia para tomar vino acompañado de una deliciosa pizza o lasagna. Es pequeño pero esencial, tiene una barra muy grande donde dejan a la vista sus botellas. La parte de afuera es más ideal para llegar en pareja y disfrutar del rubor que provoca un tinto en una charla íntima. Si no vas con mucho apetito su variedad de tapas resultan un complemento realmente exquisito. Te remendamos probar la de chorizo al vino tinto, cualquiera de sus raciones de papas (ya sean gratinadas, cambray o bravas) y su queso provoleta. El clericot es una opción que no puedes dejar pasar. En cuanto a los precios, sus copas oscilan entre los $80 pesos y las botellas ente los $200 y $400.
Dirección: Oaxaca 69, (cerca de la fuente Cibeles), Roma Norte, Ciudad de México, D.F.
Romelia
Iluminación tenue y deliciosa música suave para acompañar una velada tranquila en compañía de vino y un buen queso. En el Bar Romelia se olvida el tiempo y se disfruta del instante, pues gracias a su diseño minimalista (paredes de ladrillo, luces discretas y una sencilla cava a la vista) y a sus increíbles platillos muy ad hoc para el maridaje, se es posible perder la noción de cualquier pendiente para dejarse llevar por el sabor de un tinto español, chileno o mexicano. El lugar es bastante casual, para un antojo espontáneo, nada avanzado. Conviene comprar la botella (que oscila entre los $250 y $500 pesos).
Dirección: Tabasco 99 B, colonia Roma, México, DF. CP. 06700
Central de Vinos
Esta tattoria italiana llama mucho la atención por su gran fachada cubierta de enredaderas y su diseño interior elegante y romántico. No está de más subrayar lo de romántico, pues además de su piso bicolor que contrasta muy lindo con los tonos rojizos de todo el lugar, en cada una de las mesas se ponen velas mientras su exhaustivo horno de piedra prepara pizzas exquisitas. Aquí además de los platillos clichés italianos se pueden pedir tablas de quesos para acompañar tu vino; los precios de las botellas oscilan entre los $200 y $500 pesos.
Dirección: Centenario num. 60, Coyoacán, DF
NonSolo.
Franquicia especializada en comida italiana y del mediterráneo; pequeño y también de pinta casual para preocupar y comer rico. En este lugar se come en porciones grandes a precios bastante accesibles (por persona no gastas más de $400). Hay buenos tragos y cervezas artesanales pero sin duda lo mejor es su carta de vinos, tintos y blancos, que puedes degustar en copa (aprox. $80 según el vino) o comprar botella, que no rebasa los $500. Cada uno de sus establecimientos esparcidos en la ciudad son ideales para pasar un rato tranquilo en pareja o en grupo.
Consulta aquí las sucursales.
Envinarte
Difícilmente podemos encontrar lugares que nos ofrezcan variedad de vinos mexicanos a precio justo. Y es que tal vez, el famoso adjetivo “artesanal” está disparando los precios de manera irracional, logrando una paradoja única en la ciudad, que es la de tener riqueza en los productos de origen pero a precios inaccesibles. Afortunadamente existen lugares como Envinarte, un sitio con una cava internacional nivel experto, acentuando su interés en los vinos mexicanos. Aquí puedes encontrar de todo tipo: tinto, rosado, blanco, espumoso; Envinarte también se preocupa por informarnos sobre cómo se debe degustar un vino y para ello realiza cursos de catas para principiantes y avanzados. Dentro de cualquiera de sus dos locales también puedes acompañar tu vino con tapas, ensaladas, paninis o charcutería francesa.
Dirección:
*Juan Salvador Agraz 97, Santa Fe, México.
*Marché Dumas, Alejandro Dumas 125 (entre Masaryk y Horacio Polanco) Polanco, DF.
La Vinería
A veces lo pequeño suele ser mucho mejor, y La Vinería tiene bien claro esto, pues es precisamente su reducido tamaño lo que nos obliga a cenar en uno de los parajes más pacíficos de la Condesa. En este pequeño bistrot lo esencial es, además del vino, la cocina, ya que su menú -nada pretencioso- está repleto de delicias preparadas como en casa. Hay platillos casuales como la pasta, hamburguesas y sus sublimes emparedados, y también tienen platos fuertes como. Incluso se atreven a prepararte lo que pidas si es que tienen los ingredientes a la mano. A pesar de que el nombre lo institucionalice como un clásico restaurante moderno de la Condesa, la realidad es que este lugar es pionero (tal vez por eso es que además de secreto, es uno de los lugares donde mejor se come en la zona). En cuanto a sus vinos: los mejor curados y también los más baratos de la zona.
Dirección: Fernando Montes de Oca 52, Condesa, DF.
King Cole Bar
Se trata del elegante bar del hotel St. Regis, un sitio sin duda alguna bohemio ya que aquí se presenta música en vivo (generalmente jazz) al mando de un contrabajo y un piano. Su carta de mitología es amplia pero si visitas este lugar estás obligado a darte una sesión únicamente de vino, pues goza de una impresionante vista de Avenida Paseo de la Reforma y específicamente de la Diana Cazadora, paisaje que dpodrás disfrutar en la comodidad de sus elegantes sillones al aire libre. La decoración del lugar con pisos de madera oscura, un estilo inglés sutil, amplios ventanales, y una pintura en gran formato de Pablo Weisz Carrington, hijo de Leonora Carrington, le dan a este sitio una calidez elegante.
Dirección: Paseo de la Reforma 439, Esquina con Río Misisipi, Col. Cuauhtémoc, DF.
Web.
Leave a Reply