El nopal, además de formar parte del escudo nacional mexicano, es una planta base e importante de la riqueza floral del país. Esta cetácea azteca, anteriormente llamada notchtli o nopalli, no sólo está presente en la gastronomía tradicional –y a veces hasta en la moderna–, también en la medicina tradicional mexicana contemporánea.
Los antiguos aztecas, aquellos que fundaron Tenochtitlán donde vieron el águila posada sobre un nopal, no sólo usaban esta planta como alimento, también como recurso medicinal: para combatir la diarrea, la gastritis, los cólicos intestinales, la fiebre y la deshidratación; para mejorar la producción de la leche materna; para desintoxicar el hígado; como compresas calientes para desinflamar.
Actualmente en México se produce alrededor de 600 000 toneladas anuales, existiendo una vasta diversidad en su utilidad. Ahora un grupo de investigadores mexicanos desarrolló, tras diez años de pruebas, una serie de tratamientos bebibles para pacientes con diabetes, síndrome metabólico y displidemias.
Los científicos del Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas Salvador Zubirán (INNSZ) pretenden atender una crisis en relación con la salud de los mexicanos, y es que a través de una serie de bebidas creadas con nopal, soya, avena o semillas de chía, se pretende corregir las anormalidades bioquímicas de una enfermedad específica.
Las fórmulas, en una presentación en sobre, se preparan dos veces al día, bajan las concentraciones de glucosa, triglicéridos, hemoglobina glucosilada y aumentan la actividad antioxidante. Los autores de la investigación consideran que el precio de las fórmulas rondarán entre los 250 pesos mensuales –en comparación con otros tratamientos farmacológicos que ascienden a los 2 000 pesos mensuales–. Y si bien esta invención no pretende suplir en su totalidad a otros tratamientos, puede aligerar las dosis de fármacos y convertirse en un complemento excelente.
La idea es que aunque están algunos pacientes llevando un medicamento para la diabetes, puedan incluir en sus actividades este programa de consumir este tipo de alimentos para disminuir el consumo de este tipo de medicamentos. […] Se habla mucho de las estadísticas, de lo mal que estamos, pero nadie los dice que es lo que debemos de hacer.
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