Este bar nace sobretodo para intentar difundir desde un plano contemporáneo a la mística cultura oaxaqueña y las extraordinarias bondades que emanan de ella: su rica comida autóctona, sus bellas artesanías, sus psicodélicas texturas y sus deliciosos olores y detalles característicos que le han dado la vuelta al mundo. Todo bajo un concepto al que han llamado mezcalocultura es decir, el mezcal como epicentro para desarrollo de una visión neo-oaxqueña.
Con este discurso abrió sus puertas Dulce Maguey, lugar que mezcla en un amplio espacio un bar con coctelería a partir de su abundante selección de etiquetas de mezcal, una galería de artesanías inspirada en el folclore zapoteco y una breve biblioteca que puedes usar mientras degustas algún platillo estrella o bien su mixologia experimental.
El gran acierto de este lugar es que no tienen miedo a la mezcla heterogénea de su concepto. Por un lado podemos ver una decoración que hace acepción al bello estado de Oaxaca y a sus ornamentos tradicionales, como el bellísimo tapanco que resalta al entrar al recinto, y por otro lado su ambiente lleno de una elegante contemporaneidad que se vislumbra con los toques de diseños vanguardistas, como la estructura del lugar que corrió a cargo de HAT Studio, y piezas de alguno artistas como Francisco Toledo. La música no se queda atrás, y resalta desde un exquisito blues hasta sus conocidas noches de jazz.
La carta ofrece un destacado menú de antojito tradicionales: tlayudas con carne o vegetarianas, guacamole con chapulines, lasagna de hoja santa, tacos de pescado y un gran surtido de botanas. Pero sin duda lo recomendado son sus cocteles más pedidos, el Guelaguetza (mezcal, hierbabuena y fresa) y el Hierve el agua (mezcal, kiwi y un toque de chile) este último inspirado en el color de las famosas cascadas petrificadas.
Dirección: Cozumel 60. col. Roma
Horario: Miércoles 18:00 a 0:00 hrs. / Jueves a Sábado 18:00 a 2:00 hrs.
Leave a Reply