Para muchos la astronomía es una ciencia que sólo las grandes naciones desarrolladas en la actualidad llevan a cabo de lleno. Pero en esta área, México tiene una larga historia que inclusive se remonta a tiempos ancestrales, ya que los grandes avances de las culturas, denotan que los antiguos habitantes nacieron mirando a las estrellas. Tan sólo recordemos que los Olmecas y Mayas ya poseían un calendario de 365 días, además de cálculos sobre la predicción de eclipses y el movimiento de varios planetas.
El alto número de observatorios astronómicos prehispánicos es evidencia de la importancia que nuestros antepasados dieron nombre a los fenómenos del cosmos.
Siguiendo esta milenaria tradición, ya en el México contemporáneo constituido, surge La Sociedad Astronómica de México A.C fundada en 1902 con la idea de conocer, enseñar y divulgar sobre los enigmas del universo.
Durante las primeras décadas militaron varios socios activos dirigidos por el fundador Luis G. León pero no fue sino hasta pasada la revolución cuando empezó a tomar fuerza y formalidad dicha sociedad, con la construcción de un edificio en el parque público de la ciudad “Coronel Felipe S. Xicoténcatl”, que sería la base de estudio para todo aquel que deseara aprender del universo desde el punto de vista científico.
Los presidentes Porfirio Díaz, Francisco I. Madero, José María Pino Suárez y José López Portillo, además de importantes siluetas de la cultura y la ciencia como Amado Nervo, Francisco Gabilondo Soler alias “Cri-Cri”, Luis Enrique Erro, Justo Sierra y Guillermo Haro, fueron algunos de los principales miembros de esta sociedad.
Otro de los logros más importantes fue la construcción del primer planetario en México y en latino América el 2 de marzo de 1959 como parte del 57 aniversario de la fundación de la Sociedad Astronómica de México. un modesto planetario, con capacidad para sesenta personas.
Actualmente la SAM cuenta, con sedes ubicadas en la Ciudad de México y el Estado de México. La principal se encuentra en el parque. Felipe Xicoténcat. edificio que equipado con un taller de óptica, taller mecánico, una biblioteca especializada en ciencias, salas de cómputo y lectura, planetario, observatorio astronómico, sala de usos múltiples y se inaugurará próximamente un museo.
La segunda sede ubicada en el parque Francisco Villa, se cuenta con un planetario para 140 personas y un auditorio para 140 personas.
En el estado de México, ubicado en el municipio de Chapa de Mota. Se cuenta con un observatorio astronómico, protegido por una reserva natural de más de 6 mil hectáreas.
A pesar de contar con una estructura tan amplia como la que se da en países como Estados Unidos, en donde hay más de cinco mil astrónomos profesionales, México tiene, desde tiempos inmemorables, un alto prestigio en el campo de las astronomía.
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