Barcelonnette, en el sur de Francia, es una comunidad que mantiene viva la tradición mexicana.
Es común encontrarnos trazos de la arquitectura francesa en la Ciudad de México. Destellos que nos transportan, a veces, a emblemáticos sitios del país europeo que incidió fuertemente durante un buen tiempo en el México rumbo a la modernidad.
Como sabemos, mucha de la arquitectura y de las invenciones foráneas del siglo XX, fueron traídas más rápidamente a México que a ningún otro lugar de la orbe gracias a Porfirio Díaz. Parte de esta transformación del país fueron sin duda los estilos arquitectónicos, las comunicaciones y las artes.
Pero hubo un episodio de la historia en que México tuvo cierta influencia en una región francesa, a grado tal que hoy se le conoce como la ciudad más mexicana de Francia.
Barcelonnette es una comunidad del departamento de Alpes-de-Haute-Provence (Alpes de Alta Provenza) al sur de Francia. En esta región de los Alpes franceses existió una fuerte emigración –primero en 1821 y luego con mayor fuerza entre 1850 y 1910– de europeos que llegaron a México en busca de mejores oportunidades.
Existen diversas versiones acerca de cómo es que se hizo popular la leyenda de que en México uno se podía hacer de una gran fortuna fácilmente. Así que los barcelonnettes comenzaron a emigrar; entre 1600 y 5,000 habitantes partieron a tierras mexicanas.
No se tiene la exactitud del número de franceses –incluso se ha estimado que fueron poco menos–, sin embargo para la época, unos miles de habitantes saliendo de una ciudad era mucha cosa. A estos franceses inmigrantes se les reconoce su nexo patriota que tenían hacía otros franceses estando en México pues, como advierte Raoul Bigot en un estudio publicado en 1908: “si un barcelonnette necesitaba un empleado, mandaba traer a un compatriota, si necesitaba diez, traía diez compatriotas…”
Comenzada la Revolución Mexicana, los franceses regresaron poco a poco a sus tierras natales. Los llamados Mexicains, a su regresó, construyeron todo tipo de lugares que recordaban enormemente a México. Destacan sus Villas, con nombres como Villa Morelia, Villa Puebla o La Tapatía y su arquitectura con las llamadas maisons mexicaines (casas mexicanas) con acabados coloridos. Tradiciones, música, fiestas. Los estímulos mexicanos permearon su vida cotidiana, llevándosela consigo a Barcelonnette.
Hoy en día Barcelonnette es la ciudad más mexicana de Francia. Incluso por estas fechas (agosto) se celebra la Fêtes Latino-Mexicaines, un festival donde los habitantes se organizan para preparar comida mexicana, conciertos, mariachis, exhibiciones y danzas regionales durante una semana, y que año con año han recordado la tradición de sus antepasados de celebrar como si también fuesen mexicanos.
Imágenes: Instagram / Creative Commons
También en MXCity: Sobre la ciudad de México y sus trazos parisinos extravagantes
Leave a Reply