Satélite y Coapa están en polos opuestos, pero hay un no sé qué, que los hace similares.
Aquellos que viven en Coapa y Satélite están orgullosos de ser de ahí. Son barrios en los abundan las casas raras, las tiendas grandes y las personas que aman sacar su carro hasta para ir a la esquina. Aunque para el resto de los capitalinos ambos lugares son casi idénticos, sus propios residentes aseguran que eso es mentira, y ahondan en las particularidades que cada uno tiene.
Quizá la diferencia más grande está en su historia. En un inicio Villa Coapa era uno de los muchos huertos que rodeaban a la Ciudad de México. Aunque hoy es todo cemento, en otra época abundaban las tierras fértiles de las que salían flores y verduras. De hecho, esos terrenos estaban divididos en haciendas desperdigadas por todo el espacio que dejaban en el ambiente un tufo a animales y a tierra, que algunas partes persiste.
Por otro lado, la historia de Satélite se remonta a la era prehispánica. Algunos expertos han indicado que ahí vivía la cultura Tlatilca, aunque no hay muchos vestigios de esto. Otra huella del pasado se remonta a la Colonia, donde supuestamente se encontró debajo de un maguey una insignia religiosa, y esto provocó la construcción de La Capilla de Nuestra Señora de los Remedios.
Coapa, tal cual la conocemos, se fundó en 1968 para darle un hogar temporal a los jueces y periodistas que habían llegado a la CDMX para cubrir las Olimpiadas. Quedaba tan lejos de todo que para la mayoría de los capitalinos visitar este sitio alejado representaba una travesía larga. Se cuenta que las personas decían: “A poco vas a ir ahí, donde termina el Periférico.”
El inicio de Satélite es un poco distinto, empezó con la utopía de construir a las afueras de la gran metrópoli, “una ciudad del futuro” ideada por los mejores arquitectos mexicanos para dar una solución al desmesurado crecimiento de la capital mexicana. La idea era crear un lugar autosuficiente lleno de servicios, que trajera la modernidad a México.
Aunque sus orígenes son un poco distintos, la siguiente parte de su historia se parece. Ambos lugares se vieron directamente afectados por el gran crecimiento de la población y la corrupción de otorgar predios indebidos, esto afectó enormemente su fisionomía. Pronto se llenaron de tiendas, escuelas y demás espacios que las convirtieron en islas autónomas, llenas de gente que tenía todo al alcance de la mano.
En Coapa se crearon Unidades Habitacionales y nombraron a las calles con seudónimos raros, como de equipos de futbol. Ahí vive, el Club América y la famosa taquería Copacabana que recuerda a ese bar de la Guerra de las Galaxias.
En Satélite están erguidas en el horizonte unas torres que le recuerdan a México esa añoranza de modernidad que había en los años setenta, ahí se hizo el video de Ingrata de Café Tacuba, está el hermoso Parque Naucalli y hay un sinfín de lugarcitos para escuchar bandas roqueras y pasarla genial sin salir del residencial. 
Y tú, ¿cuál prefieres? Las dos tienen un encanto digno de las mejores crónicas que se hacen en la Ciudad de México y son dos referencias obligadas para hablar de la capital.
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