Nima es una casona espectacular, que hace sentir en casa a cualquier tipo de huésped.
Alrededor de la Ciudad de México existen cientos de edificios hoteleros, que bajo el concepto de “cadena” buscan, de manera tradicional, ofrecer alojamiento (por lo general) a turistas que visitan la ciudad. Pero si concebimos a la urbe más como un destino cultural, histórico y hasta gastronómico, resulta pertinente pensar que existan otra clase de hoteles que pretendan llevar más allá el concepto de hospedaje.
Estamos hablando de los hoteles boutique, esos acogedores lugares donde persiguen la noción de la experiencia, y buscan ofrecerle una única al huésped, a través de una atención personalizada, íntima, interesante y única.
Un claro referente de esta ideología es el Hotel Nima, un lugar que se diferencia a los demás hoteles de cadena citadinos por tres cosas. La primera es su ubicación, pues se erige en una de las calles más hermosas de la genial colonia Roma, en Colima. La segunda es sin duda su diseño. Desde que uno se encuentra con la fachada sabe que lo que aguarda adentro es un precioso mundo, que evoca el estilo afrancesado tan propio de la década de los 40.
Finalmente, y el elemento quizás más importante de Nima, es su servicio. Aquí, verdaderamente y de manera genuina se esmeran por brindarle al huésped una estadía cómoda y reconfortante, que los haga sentir como que pertenecen a Nima, un término que quiere decir “grande” y proviene del quiché, un dialecto maya.
Cuando un extranjero visita la ciudad, es importante que también su hospedaje se sienta mexicano. Y es que las casonas que abundan en la colonia Roma son también parte del paisaje urbano que constituye a la ciudad. Por este motivo Nima compone una excelente opción de hotel, pues ofrece una estadía mucho más local.
Prueba de esto son las recomendaciones que el personal de Nima se jacta de darles a sus huéspedes. Les hablan sobre las nuevas propuestas gastronómicas de la zona, acerca de los rincones escondidos de la ciudad y de los tours más divertidos y originales que se pueden tomar.
El valor intrínseco de Nima, sin duda alguna, radica en la casona. Poco se sabe de su vocación en el siglo XX, pero cabe mencionar que aún prevalecen los pisos de madera, las angostas escaleras y los marcos en los muros.
Son cuatro los cuartos que comprenden Nima, todos diseñados para parejas. Cada uno cuenta con su propia historia, y se nombra en honor a un inquilino que alguna vez lo habitó, como Guillermo Tovar y de Teresa, quien fue uno de los principales responsables de restaurar los muros y los detalles estéticos de la casa.
La decoración responde al estilo Wabi-sabi, un término japonés que se basa en la belleza de la imperfección. Diversas plantas y tonos grises adornan los diferentes sitios de la casa, que de manera armoniosa conviven con el estilo afrancesado que la define.
En Nima ofrecen un delicioso menú para las tres comidas del día. Destaca su ensalada de pollo al curry, una fresca y ligera opción para el almuerzo. También tienen tortas increíbles, como la de roast beef y la de cochinita pibil. Cabe mencionar, que cuentan con pan hecho en casa, lo que le da un toque especialmente rico a sus platillos. Es ideal comer en su hermosa terraza, llena de plantas y con una linda fuente de cantera.
El Hotel Nima, en realidad, es una mujer. Es alguien que le gusta leer, disfruta de estar en familia, adora la naturaleza y tiene un excelente carisma. Y la verdad, todas estas características se sienten en todos los cuartos que se desdoblan por la casona. Nima es una de las mejores opciones para hospedarte en la colonia Roma, si lo que estás buscando una experiencia pacífica, agradable e inolvidable.
Hotel Nima
Dirección: Colima 236, col. Roma.
Teléfono: 7591 7175.