Se trata de un proyecto que busca recuperar la comida para posteriormente venderla a un menor precio.
En 2013, un estudio destacó que alrededor del 84% de la comida que desechan los restaurantes, cafeterías, locales de comida rápida y servicios de banquetes termina en vertederos. Tan solo en Estados Unidos, se desperdician 43 billones de libras de comida al año, lo cual, además de tener un fuerte impacto ambiental, también tiene consecuencias para los negocios.
En pocas palabras, los locales están tirando buena parte de sus ingredientes, ingredientes por los cuales han gastado una significativa suma de dinero.
La realidad es que si bien existen varios restaurantes alrededor del mundo que cuentan con proyectos de acción social que donan su comida, esto no sucede muy seguido y ciertamente no es una solución absoluta. Por este motivo, en Massachusetts, se ha lanzado la nueva aplicación para móvil Food for All.
Se trata de una app que busca conectar a los usuarios con los diferentes restaurantes, para ayudarlos a eliminar el desperdicio de alimentos a través de la compra, a menor precio, de éstos.
Los clientes que cuenten con esta aplicación podrán ahorrar hasta un 50% en sus pedidos. Además, la app mostrará con prolijo información acerca de los beneficios que estás logrando comprando esta comida y eludiendo que se desperdicie y acabe en un gigante basurero.
Para que los clientes no aprovechen la situación de comprar comida más barata, la app funciona de esta manera: al ingresar, podrás ver qué restaurantes están ofertando sus últimos alimentos, aquellos que no se vendieron durante el día. Sin embargo, no podrás saber qué tipo de comida es, puede ser desde una pizza o una ensalada, hasta tacos y hamburguesas. Esto se hace con el objeto de que los usuarios no pretendan estafar al restaurante.
La idea es que los locales que estén inscritos, además de ofertar su comida en la app, también puedan donarla en bancos alimenticios. De esta forma, nunca desperdiciarán nada de sus sobras.
Actualmente, la aplicación se encuentra funcionando con 30 restaurantes de Boston. Se trata de una iniciativa que se está mejorando con programadores de Harvard University. Es un hecho que el modelo de negocio es un éxito, ahora resta reunir los fondos necesarios para terminar con los pormenores de la app.
Quizá pronto esta idea comience a replicarse en otras ciudades del mundo, como en la Ciudad de México, donde existen cientos de restaurantes con profusa cantidad de comida.
Lo cierto es que no es necesario crear una aplicación para lograr este importantísimo cometido, pero sí es preciso empezar a crear conciencia y pensar en qué paradero podría tener toda esta comida que día con día se tira. Si eres propietario de algún restaurante o conoces a alguien que lo sea, plantéale la idea y vean qué cambio pueden lograr con una iniciativa como esta. La transformación de la ciudad está en manos de sus habitantes.
Fuente: Fastcoexist.