Quienes han seguido el trabajo fotográfico de nombres como Manuel Álvarez Bravo o Cartier Bresson en México, gustarán del trabajo fotográfico de Flor Garduño.
Flor Garduño es para muchos una surrealista de la fotografía. Para otros más, una fotógrafa del México “eterno” que a grandes rasgos retrata la esencia pura del país bajo cientos de fotografías hermosas a blanco y negro.
Garduño nació en las afueras de la Ciudad de México, en una pequeña granja a la que atribuye gran parte de su visión onírica de las cosas. Estar siempre en contacto con la naturaleza ejerció su acto de contemplación por México.
Más tarde Garduño se inició en la Antigua Academia de San Carlos en la UNAM, pero no tardó en abandonarla al momento en que Manuel Álvarez Bravo la invitó a colaborar con él en el Cuarto Obscuro. Su influencia en la fotografía de los Álvarez Bravo es bastante notable. Junto a Graciela Iturbide, Garduño es de las pocas fotógrafas mexicanas que todavía retratan a México desde esos ojos surrealistas; con cierto halo de misticismo y evocando en todo momento la mexicanidad y sus improbables composiciones.
Cuando comenzó a trabajar para la Secretaría de Educación Pública, capturando la esencia de México para libros de texto escolares, desarrolló su amor por la fotografía documental, misma que habría de construir bajo sus propios cánones de belleza.
En 1985, y alentada por Francisco Toledo, publicó su primer libro fotográfico, que le abriría puertas para seguir publicando en revistas como la DU suiza. A partir de ese momento el trabajo de Garduño fue reconocido a nivel mundial y sus fotografías son un verdadero símbolo de la fotografía contemporánea.
Actualmente la Ciudad de México cuenta con la fortuna de albergar dos exposiciones de la autora: por un lado se encuentra exhibida hasta el 4 de junio la muestra La construcción del instante, en el Palacio de Iturbide (Palacio de Cultura) de Fomento Cultural Banamex en la calle Madero del Centro Histórico.
Por otra lado, hace tan solo unos cuantos días se inauguró en la Galería Patricia Conde su serie Memorias del presente, una exposición que reúne su más reciente trabajo. Ambas muestras son una oportunidad increíble para disfrutar del trabajo de esta alucinante fotógrafa que hoy en día, y con el boom de las cámaras fotográficas es difícil de acceder o conocer.
Finalmente te compartimos algunas de sus fotografías:
*Imágenes: Flor Garduño.com
