Un disfraz, una fotografía y la posibilidad de ver un nuevo lado de la artista…
Hace más de un siglo, una casona antigua de Coyoacán vio nacer a Frida Kahlo una niña de cejas unidas que tenía la capacidad de transformar su existencia pintándose a sí misma. En el umbral de las grandes revoluciones del siglo XX, esta artista quiso improvisar su propia libertad para superar elegantemente una vida llena de dolor.
Más allá de la subjetividad con la que puede ser analizada y apreciada su obra, lo que es una certeza es que Frida no fue una mujer convencional, basta ver sus vestidos de tehuana, su colección de anillos de plata, su extraño historial amoroso y las palabras que dejó escritas en sus diarios, para comprender porque hoy todo el mundo está celebrando los 110 años de su nacimiento.
A propósito de esto, hace unos días el importante Museo de Arte de Dallas decidió rendirle un singular homenaje a la mexicana a través de un evento llamado Frida Fest, que, entre otras cosas, convocó a 5 mil fanáticos de la Kahlo a disfrazarse de su ídolo y romper así un récord mundial.
Asimismo, la Ciudad de México también se ha sumado a la fiesta por su natalicio y en honor a la surrealista, El Museo Dolores Olmedo ha organizado la exposición “Me pinto a mí misma” una muestra cuyo propósito principal es darle a conocer a los capitalinos un aspecto desconocido de la vida de la artista.
Esta exhibición estará integrada por 36 piezas, entre las que se cuentan: fotografías, autorretratos y dibujos que recorren de una manera novedosa las vivencias de la artista. Cabe destacar que, entre las obras que se exhibirán hay algunos préstamos memorables provenientes de Rusia, Corea y Estados Unidos, que sólo estarán en nuestro país por un tiempo corto.
Además de todas estas maravillas artísticas. Los asistentes podrán tener la fortuna de apreciar el retrato en blanco y negro que un día del siglo XX le tomó Guillermo Kahlo a su hija. En esta inquietante imagen se puede ver a una Frida mesurada, con cara seria y vestido negro que mira a la cámara con cierto desdén, y sin querer desafía todos los prejuicios que tenemos de ella.
Aunque casi todos conocemos su legado y hemos sido testigos de sus momentos, de los buenos y de los malos, siempre es reconfortante tomarse un tiempo para redescubrir la Frida Kahlo.
Me pinto a mí misma
¿Dónde? Museo Dolores Olmedo
Dirección: Av México 5843, La Noria
¿Cuándo?: del 6 de julio al 22 de octubre