Sigue emergiendo nuestro pasado del subsuelo…
Hace unos días, los arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia confirmaron un encuentro sorprendente. En las profundidades de un cenote de Quintana Roo, descubrieron la osamenta de un perezoso gigante que aparentemente vivió en la Península de Yucatán hace miles de años. El nombre científico que se le dio a la creatura fue Xibakbaonyx Oviceps, que se puede traducir como “la garra del inframundo”
Según los cálculos que se hicieron, los restos de este magnífico perezoso gigante tienen aproximadamente 12 mil años de edad, y son una evidencia muy importante para esclarecer el tipo de flora y fauna que había en México durante la misteriosa Era del Hielo, específicamente en el pleistoceno tardío.
De acuerdo a lo que comentó Carmen Rojas, la arqueóloga submarina encargada del proyecto, dentro del cenote se localizaron a 50 metros de profundidad: el cráneo, la mandíbula, algunos huesos largos, y 7 garras. Casi todo el esqueleto del animal.
Asimismo, la experta indicó que la forma en la que estaba acomodada la osamenta indica que antes de morir el perezoso tropezó en el cenote cuando todavía estaba seco. Es altamente probable que dicha caída lo hubiera matado.
Cabe destacar que, se sabe poco acerca de esta especie. De acuerdo a estudios recientes, el perezoso de Pote (así se le bautizó) era originario de Sudamérica y por algún motivo (aún desconocido) hace 9 millones de años migró a Norteamérica. Se puede intuir que llegó aquí nadando y que tomó la ruta las islas Antillas cuando América estaba dividida por un océano.
Este hallazgo es sólo el primero de muchos, de hecho,el INAH planea continuar las excavaciones en este cenote en el 2018, porque además del esqueleto del perezoso se rescataron también los restos de un roedor endémico que estaba dentro de su cráneo y los huesos de un puma que posiblemente fue su presa cuando estaba vivo.
Desde hace un tiempo, la costa de Quintana Roo se ha convertido en un lugar muy importante para los arqueólogos por la enorme cantidad de fósiles antiquísimos que se esconden en las profundidades de las cuantiosas cuevas que hay en Playa del Carmen. Hasta ahora se han encontrado toda clase de animales del final de la Era del Hielo, hasta huesos de tigres dientes de sable.
Es maravilloso imaginar cómo fue México en otras eras geológicas. Dejarnos llevar por la magia de la arqueología, que sin que nos demos cuenta, hoy nos tiene leyendo acerca de un animal que caminó en el inicio de los tiempos.
