“Toda el agua que habrá jamás, la tenemos ahora mismo.”
En este momento de la historia todos los países del mundo sufren cambios climáticos y ambientales. Las zonas que se ven mayormente afectadas por estos fenómenos son las urbes más pobladas, en las que hay más movimiento. Desafortunadamente la Ciudad de México no es la excepción.
De hecho, para la CDMX hay muchas cosas en juego por las coacciones específicas del terreno sobre el que está edificada esta metrópoli y por la sobrepoblación que hay en algunas áreas. Esto es algo muy delicado porque una gran parte de los problemas que hay aquí están vinculado al agua: su escases, el exceso de lluvia, la contaminación, la interrupción del tráfico por las inundaciones y por la fragilidad que el líquido mal dirigido le provoca esto a las estructuras (viviendas, edificios, calles).
Aunque los cambios en el clima son una amenaza a largo plazo, las consecuencias de seguir gastando inconscientemente nuestros recursos naturales van a trastocar el futuro de formas inimaginables. La falta de agua puede propiciar un escenario apocalíptico en el que los capitalinos vivan con una sola cubeta con H2O para varios días.
Quizá por eso es más que necesario empezar hoy a transformar la realidad. Es conveniente hablar de este tema, sobre todo porque actualmente 90 millones de mexicanos padecen desabasto de agua potable y tristemente la crisis se agudiza cada año.
Además dos tercios de la población mundial están bajo esas mismas circunstancias. Debido a ello el 22 de marzo el mundo conmemora el Día Mundial del Agua. Una fecha instaurada para recordarle a todas las personas que la concientización comienza en casa y que todavía se puede cambiar el destino fatal que nos espera si el líquido más preciado empieza a faltar.
Por este motivo y para empezar hoy, hemos creado una lista de consejos para reducir el gasto de este recurso tan importante, que según el New York Times tiene las décadas contadas en nuestra capital.
Báñate más rápido
Si acortas un minuto o dos el tiempo en bañarte, ahorrarás hasta 570 litros de agua al mes.
No uses la manguera para limpiar la calle…
Cuando limpies tu banqueta, cochera o cualquier otro lugar al aire libre, opta por utilizar la escoba en lugar de la manguera.
Reutiliza el agua…
Reutiliza el agua que utilices en la lavadora. Puedes usarla para lavar tu coche, limpiar los pisos, etc. Recuerda usar este tipo de máquinas a toda su capacidad. No la desaproveches sólo por un par de prendas.
Captura el agua de lluvia
Puedes utilizar recipientes para captar el agua lluvia, y con ella puedes limpiar patios y jardines.
No dejes correr el agua del grifo
Al lavar tus frutas y verduras no dejes correr el agua del grifo, es más recomendable usar un recipiente con agua y limpiarlas en él.
Usa recipientes para la vida cotidiana
Cuando cepilles tus dientes utiliza un vaso para enjuagarte, no dejes abierto el grifo. Asimismo, al afeitarte utiliza un recipiente o vaso. De lo contrario, puedes llegar a desperdiciar hasta 30 litros por persona cada día.
No tires las colillas en la calle o en el escusado
Jamás tires las colillas de cigarro al inodoro. Si fumas mejor opta por depositar los residuos en el basurero. Una colilla puede llegar a contaminar hasta 50 litros de agua con químicos intratables en la naturaleza.
Redpara las tuberías en tu casa
Coloca un colorante en la cisterna del inodoro para detectar si hay algún tipo de fuga. Si se mancha la taza quiere decir que efectivamente hay una filtración. Reparar este tipo de problemas puede ahorrarte hasta 2,000 litros de agua al mes.
Economizar el agua
Procura bañar a tus mascotas en el exterior en zonas que necesiten riego, el jardín es una buena opción. De esta manera cumples con dos tareas y utilizas solamente una vez el recurso.
No arrojes sustancias contaminantes al drenaje
No arrojes aceite de guisos, líquido de frenos o anticongelante al drenaje. Son sustancias altamente contaminantes que terminarán en nuestros ríos y mares. Júntalos en una botella de plástico y tírala al bote de basura.
Cortesía de RBA ambiental