Dulce Armenta, pionera de la filosofía Slow Fashion en México

La filosofía Slow Fashion no es una moda sino un modo de vida.

 

El término Slow Fashion o moda sostenible, fue acuñado en el 2007 por Kate Fletcher, profesora de Sostenibilidad, Diseño y Moda en el Centre for Sustainable Fashion en Londres. Es lo contrario a lo conocido como Fast Fashion o moda industrializada, donde tanto las empresas como los consumidores, toman conciencia de la situación actual y optan por comprar prendas de comercio justo, de mayor calidad y exclusividad en detrimento de las prendas a precios asequibles pero realizadas en cadena y con materiales dañinos para el medio ambiente.

Los materiales fomentados por esta filosofía son productos nobles, que no contaminan el medio ambiente y la mayoría de las veces son biodegradables, rechazando todo lo producido en cadena y promoviendo productos de calidad y perecederos.

Los mandamientos del Slow Fashion son:

  1. Oponerse a la moda producida en cantidades supra industriales.
  2. Prefiere productos artesanales para apoyar a las pequeñas empresas, el comercio justo y las prendas fabricadas localmente.
  3. Fomenta el reciclado de prendas comprando ropa de segunda mano o vintage y donando las prendas que ya no se utilicen.
  4. Elige ropa fabricada con materiales sostenibles y producida éticamente.
  5. Incorpora prendas clásicas que duren más tiempo.
  6. Hace prendas propias, repara, personaliza y altera para así alargar sus años de vida.
  7. Por último, disminuye el consumo de ropa: no comprar de forma compulsiva sino elegir prendas especiales y de máxima calidad.

Como en nuestra época los consumidores se preocupan cada vez más por conocer el origen de la ropa que adquieren, las prendas del Slow Fashion se ocupan de dónde están fabricadas sus prendas, con qué tipo de materiales, y por quién.

El Slow Fashion no es una tendencia de temporada sino una filosofía de consumo responsable de ropa.

Este movimiento concientiza y educa a los ciudadanos sobre el impacto de las prendas de vestir en el medio ambiente, el agotamiento de recursos y el impacto de la industria textil en la sociedad.

La diseñadora Dulce Armenta sacó una marca homónima, enfocada en trajes de baño, cuyas siluetas están pensadas para favorecer todos los tipos de cuerpo y personalidades, guiadas por una línea minimalista y un tanto retro, inspirándose en el estilo de las bailarinas de ballet y los colores pastel, pero sobre todo, bajo las normas de la filosofía Slow Fashion.

Dulce Armenta es nacida y criada en la Ciudad de México. Estudió Diseño Textil en la Universidad Iberoamericana en México y ESDi Escola Superior de Disseny en Barcelona. Desde 2010 trabajó creando ropa deportiva y después se encontró con la industria del denim hasta el 2015. Después de cosechar experiencia en la industria estableció su marca homónima de ropa casual y prendas básicas de alta calidad y fáciles de usar, buscando promover la moda mexicana internacionalmente.

Su línea actual consiste en trajes de baño de una sola pieza, que se caracterizan por ser elegantes y simples para destacar la sutileza de la sensualidad a través de piezas únicas, todas diseñadas y confeccionadas en la ciudad de México. Hoy en día, Dulce Armenta piensa lanzar una colección de accesorios.

Puedes encontrar sus piezas en el Showrooom Indian Pipe Society ubicado en Chihuahua 56, Roma Norte, CDMX. En Biuriful en playa del Carmen y La Tiendita Tulum, o en su página online dulcearmenta.com que cuenta con envíos a todo el mundo.