En el universo, tal cual como lo conocemos, existen galaxias compuestas de estrellas, gas y polvo. Estas estrellas emiten luz reforzada por el gas y el polvo cósmico, y la cual nos cuenta la historia del universo en constante renovación. Se trata de una serie de historias apasionantes capaces de iluminar al humano con la psique más oscura y caótica en la Tierra.
La astronomía es una ciencia antigua, tan antigua como la primera vez que un humano alzó la cabeza y señaló el horizonte. Desde épocas remotas los hombres hemos querido registrar los movimientos del cielo nocturno y por eso a lo largo del tiempo se han construido observatorios que nos permiten entender mejor: las estrellas, los planetas y el sol. Aunque todavía hay millones de cosas que no sabemos acerca del universo, ya hay algunas agradables certezas.
Sabemos, por ejemplo, que el firmamento cambia todas las noches y que se ve distinto según la región en la que se esté. Sabemos que los antiguos clasificaron los cielos; agruparon a las estrellas en constelaciones y crearon una leyenda para cada una. Sabemos que la única aglutinación de puntos luminosos que se ve en todos los lugares del mundo es la de Orión, que la estrella más brillante se llama Antares y que nuestra galaxia (La Vía Láctea) luce como una franja horizontal, azul claro.
También hemos oído hablar de la Osa Mayor (con su cola gigante) y la Osa menor un par de constelaciones en las que vive la famosa Estrella Polar (Polaris) un puntito brilloso que desde hace miles de años ha sido la inspiración y la guía de piratas, escritores y todas las personas perdidas que deambulan en la Tierra.
En México, existe un gusto especial por la magia de la astronomía. Si bien se ha convertido en una puerta abierta al público científico, también resulta ser alentador para personas en búsqueda de belleza, arte o misticismo. Por ello la Noche de las estrellas se ha vuelto una fiesta que, desde 2009, se ha dedicado a llevar la ciencia de los cielos al lado más empoderante de sus visitantes.
La Noche de las Estrellas tiene 10 años reuniendo a los que aman ver cuerpos celestes y los misterios del cosmos. Casi dos millones de personas han ido en algún momento a observar los astros en las noches que organiza el Instituto de Astronomía de la UNAM. Ahora, para celebrar esos muchos días de astronomía compartida, el Comité Nacional de la Noche de las estrellas, el Instituto de Atronomía de la UNAM, y la Casa del Lago organizan este evento especial: Noche de las estrellas– Diez años, casi dos millones de participantes, el sábado 9 de febrero.
Se podría decir que la Noche de las estrellas pretende afianzar la cultura científica a través del arte, telescopios y grupos astronómicos. Año con año, esta fiesta ha logrado expandirse a lo largo de numerosas sedes; pues de hecho, actualmente cuenta con más de 50 sedes en 31 entidades de la República Mexicana, en Colombia y China.
Noche de las Estrellas
Dónde: Casa del Lago
Dirección: Bosque de Chapultepec Primera Seccion S/N, San Miguel Chapultepec I Secc, 11850 Ciudad de México
Cuándo: Sábado 9 de febrero
Programa:
13:00 horas. El sonido dorado de las Voyager con comentarios de Leticia Carigi, Alejandro Farah y José Wolffer.
Audición de algunos de los materiales musicales y sonoros que llevan en sus respectivos discos dorados las sondas Voyager, ambas lanzadas en 1977 y hoy ya fuera del Sistema Solar, provenientes de distintas culturas y especies del mundo.
Dónde: Espacio Sonoro / Entrada libre
19:00 horas. Mesa redonda Noche de las estrellas – Diez años, casi dos millones de participantes con José Franco y Jesús González. 19:00 horas
Dónde: Sala Rosario Castellanos / Entrada libre
20:00 horas. Observación astronómica 20:00 horas
Desde el 2009, la Noche de las Estrellas ha congregado a más de dos millones de participantes. Casa del Lago UNAM se suma a este encuentro de divulgación de la ciencia, cuya misión es compartir el entendimiento del universo.
Dónde: Terraza y jardines / Entrada libre
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