El Neobarroco es la denominación de un estilo arquitectónico, escultórico, musical y literario, imitación del Barroco, que floreció en la segunda mitad del siglo XIX, como reacción a la frialdad académica imperante. París, así como otras grandes ciudades europeas tienen un aspecto neobarroco. El neobarroco tiene grandes puntos de contacto con el Romanticismo.
También se denomina neobarroco a una modalidad de la estética posmoderna, muy poco romanticista, típica de fines del siglo XX e inicios del presente siglo XXI. Lo que tienen en común ambos “estilos” tan distintos llamados neobarrocos (siendo por su parte el barroco según acertadamente lo han caracterizado -como también al tan opuesto Expresionismo- Jacob Burckhardt y luego Erwin Panofsky un “no-estilo”) es la recargazón, cierta lujuria, la exuberancia y la desestructuración.
El Diseño Neobarroco da cuenta, a manera de juego de espejo, del objeto cotidiano y su proyección artística, a través de la mirada de reconocidos diseñadores nacionales e internacionales.
La exposición Diseño Neobarroco, conformada por 27 piezas de artistas mexicanos e internacionales, es una aproximación a la creación contemporánea de objetos funcionales que busca lograr esa comunicación íntima y estética para sentir la belleza del entorno.
Alejandra de la Paz, directora del Museo Franz Mayer, aseguró que esta muestra, que inicia el programa de exhibiciones 2019 en el recinto, es una mirada a las tendencias internacionales en el diseño y un reflejo de las preocupaciones y ocupaciones de los artistas. La muestra estará abierta al público a partir de hoy y presenta obras de la arquitecta Zaha Hadid (1950- 2016), Ingrid Donat, Vincent Dubourg y Nacho Carbonell, entre otros.
Otros creadores mexicanos y de Brasil, Países Bajos, Japón, Francia y Argentina presentan obras recientes que se han exhibido en diferentes naciones del mundo y muestran las vivencias más allá de las ideologías, de ahí que las temáticas giren en torno a lo social, a la idea de comunidad y a la manera en la que conviven unos con los otros, dice el curador Ignacio Prado.
Para entender más de esta propuesta estética-funcional, el curador señala que se puede definir al Neobarroco como el mestizaje de diferentes corrientes como la Bauhaus, el Art decó, entre otras, con la inclusión de técnicas artesanales, lo que crea una hibridación que lleva a los artistas a la libertad y a realizar piezas innovadoras.
Entre los artistas que integran la muestra destacan Gloria Cortina, Nacho Carbonell, Sarah Burton, Vincenzo de Cottis, Frank Gehry, Marcel Wanders, Sebastian Brajkovic, Zaha Hadid, Carla Fernández, Fernando y Humberto Campa, Junya Watanabe, Thierry Jeannot, Maarten Bass, Jorge Cejudo, Pablo Reinoso y Héctor Esrawe, entre otros.
En un recorrido por la exposición se apreció cómo los diseñadores experimentan a través de la madera, el metal, la piel y el papel, valiéndose todos sus recursos para ofrecer una nutrida visión del neobarroco.
Compuesta por cinco núcleos temáticos, la muestra incluye “El Jardín de las Delicias. Naturaleza y Artificio”, donde se observan objetos con referencias naturalistas que dialogan en armonía. Los núcleos restantes son La Cámara Claroscura. Objetos de luz y sombras, La otredad de los objetos conceptuales. La poética del diseño, El salón de las artes. El mestizaje de materiales y formas y El oro barroco. La Transformación de los materiales.
Diseño Neobarroco
Dónde: Museo Franz Mayer
Dirección: Av. Hidalgo 45, Centro Histórico, Guerrero, 06300 Ciudad de México, CDMX
Cuándo: Hasta el 28 de abril
Horarios: martes a domingo 10 a 17 horas
Fotografía principal: Financiero