Los Nardos es un aporte de la flora mexicana para el mundo.
La flor Nardo tiene un increíble aroma. Su presencia es tan refinada que no deja indiferente a nadie y su flor es cautivadora. Sobre todo México y en algunas otras regiones de Guatemala, El Salvador y Belice, así como el occidente de Honduras, Nicaragua y Costa Rica, se han aportado al mundo múltiples especies, procedentes de sus diversos tipos de vegetación, en especial plantas comestibles y con usos medicinales y ornamentales.
Muchos nardos han sido llevadas a otras regiones del mundo, donde se han manipulado y diversificado dando origen a una gran profusión de cultivares, ahora disponibles para la industria hortícola y agrícola mundial, de gran importancia económica.
El nardo u omixóchitl (Polianthes tuberosa) es una especie de flor aromática que actualmente se asocia en México con los olores de las iglesias o con los velorios. La duración de su flor una vez cortada y su aroma la han convertido en una de las flores más usadas en floricultura.
Esta planta también ha sido adoptada en otros países para la elaboración de guirnaldas y collares; por ejemplo, en Hawaii se usan collares elaborados con estas flores son considerados muy especiales por su fuerte aroma que para algunos usuarios llega a ser demasiado intenso y embriagador.
El origen de los nardos está en México y está compuesta por 20 especies. Se trata de una flor cultivada desde la época prehispánica que recibía los nombres en náhuatl de amole y omixochitl y, en maya, el de tixzula. El primero se puede traducir como jabón y el segundo como olor de hueso, debido a la forma y al color de sus ores.
El amole era una planta muy preciada y utilizada con distintos fines. Uno de ellos era como sustituto de jabón gracias a sus propiedades anti bacterianas. Los nardos fueron importados en 1594 a Europa. El responsable fue el médico español y fundador del primer jardín botánico de Sevilla: Simón de Tovar. Más tarde, Holanda se hizo con el monopolio de su cultivo. Luego, dicha flor fue llevada a países como Italia y Francia. En este último, se cultivó principalmente en El Valle Del Río Siagne, lugar cercano a Cannes y Grasse.
En Francia se cosechaban cerca de 75 toneladas por año. Esto con el fin de procesarlas en distintas perfumerías y con el paso del tiempo, la exquisitez del aroma de esta planta conquistó Marruecos, la India y otras partes del mundo. A pesar de su notable popularidad, el nardo fue catalogado como una planta peligrosa para las muchachas. Y es que su aroma es tan intenso y embriagador que en exceso, podría resultar incluso como un narcótico, y se pensaba que los jóvenes podían perder el dominio de sí mismas e incurrieran en actividades que mancharan su “honra”.
Si te apetece plantar Nardos, es muy fácil y estamos en el momento idóneo para hacerlo, en primavera. Para ello es conveniente que sitúes la planta en una zona en la que reciba mucha luz solar directa durante unas 6 u 8 horas diarias. Vas a necesitar que el suelo sea rico en materia orgánica y que cuente con un buen drenaje para evitar que se produzcan encharcamientos de agua que perjudicarían a la planta.
A la hora de plantar los bulbos deja un espacio de 15 a 20 cm entre unos y otros. El riego adecuado es moderado durante todo el año pero en los meses de verano y durante el período de la floración, será necesario que sea más abundante. Para que la planta te deleite con muchas y bonitas flores, y que éstas sean de calidad, renueva el bulbo todos los años
Te dejamos con esta galería de nardos ya que estamos cerca del inicio de la primavera.