Visita este pequeño rincón húngaro en el corazón de la Condesa.
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Hungría es un país de Europa Central entre las fronteras de Eslovaquia, Ucrania, Rumanía, Serbia, Croacia, Eslovenia y Austria. Esto hace que Budapest, su ciudad capital, sea un centro diverso y multicultural. Se habla húngaro, también conocido como magiar, que pertenece al grupo ugrofinés y que además es la lengua no indoeuropea con más hablantes de toda Europa.
Por Hungría han pasado pueblos como los celtas, los romanos, los hunos, los eslavos, los gépidos y los ávaros, hasta que el príncipe Árpád fundó Hungría en el siglo IX d. C. El Reino de Hungría existió durante cinco siglos y en algunos momentos de su historia llegó a ser uno de los centros culturales del mundo occidental.
Entre 1947 y 1989 Hungría estuvo regida por un gobierno comunista, un período en el que fue el centro de la atención mundial por la Revolución de 1956 y por la pionera apertura de su frontera con Austria en 1989, hecho que aceleró el colapso del Bloque comunista. Desde 1989 Hungría es una república parlamentaria y se la considera un país desarrollado siendo uno de los destinos turísticos importantes en Europa, atrayendo a más de diez millones de visitantes todos los años.
El Café Budapest es el pequeño monumento que tenemos de Hungría en la CDMX. Este sitio deja una gran impresión no solo entre sus visitantes, sino también entre los transeúntes que caminan sobre la calle Tamaulipas en la colonia Condesa. Es difícil no voltear a ver el lugar y algunos se paran solo para examinar los platos y las chacharas que están en el sitio.
“Cukrászda” que significa confitería en húngaro, y tiene ese letrero justo por los postres colocados sobre la barra del café: galletas, pasteles, pays, merengues, lo que sea se ve delicioso.
Gabriela Biringer, una mexicana hija de húngaros que llegaron a México después de la Segunda Guerra Mundial, fundo este templo de postres austrohúngaros. En este café Budapest se respira en las paredes, en la imagen del Parlamento y en la fotografía de la mamá de Gabriela. Lo más genial del lugar, son los hermosos juegos de té, antigüedades y, siempre, música clásica.
Biringer los postres con las recetas originales de su madre y todos son excepcionales. El sacher es un pastel sin harina con chocolate, nuez molida y chabacano. El pay de limón y el pastel de yogurt con zarzamoras; son fabulosos, así como las galletas de avellana y chocolate, los brownies o el pastel selva negra. El café turco es sublime.
Por supuesto el café tiene un aroma exquisito. También cuenta con una oferta salada que incluye quiches, ensaladas y crepas y un menú de platos tradicionales húngaros para satisfacer tu antojo de comida europea fuera de lo conocido. También hay deliciosas infusiones con un sabor distintivo que solo puedes encontrar en este lugar. La dobostorta, es un pastel en capas rellenas de crema de cacao y craquelado de caramelo.
Café Budapest
Dónde: Avenida Tamaulipas 130, Hipódromo Condesa, Cuauhtémoc.
Cuándo: Lunes a sábado de 11:00 a 22:00 y Domingo de 11:00 a 20:00 horas
Cuánto: $190