¡No tires las colillas de cigarro al suelo! Esto es lo que ocurre cuando lo haces.
Cuando pensamos en las colillas, tal vez tengamos la idea de que no son contaminantes, pues el tabaco y la nicotina del cigarro ya fueron consumidas y no existe otro material en el filtro que pueda dañas al medio ambiente. Incluso hay gente que cree que por su apariencia y su pequeño tamaño, las colillas de cigarro son biodegradables. Pero lo cierto es, que estos filtros pueden llegar a causar daños inimaginables.
No sólo se trata de un problema de contaminación, ya que al final del día son basura; las colillas de cigarro representan una problemática importante cuando de la fauna del planeta se refiere.
En nuestro país, más del 50% de los cigarros se consumen en el exterior, y de éstos, únicamente un aproximado del 59% se deposita en ceniceros o basureros. Esto quiere decir que más de 4000 millones de colillas acaban en los suelos de las ciudades de México.
Tan sólo una colilla de cigarro tarda de dos a 10 años en degradarse. Pero la verdad, es que el tiempo no es lo más preocupante de este asunto. Aquí lo que más influye es la toxicidad que las colillas de cigarro van acumulando durante los años. Para empezar, los filtros están hechos con acetato de celulosa, un elemento que por sí solo tarda más de 100 años en degradarse de manera natural.
No olvidemos el objetivo principal de las colillas, que es filtrar y acumular los componentes de tabaco. Contrario a lo que muchos creen, la vida de un filtro de cigarro no acaba cuando el consumidor lo lanza al suelo o lo pisa. La colilla seguirá absorbiendo todos aquellos químicos nocivos con los que se tope en las calles.
De primera instancia, este componente de las colillas podrá sonar bueno. El filtro funciona como una clase de aspiradora, ya que se encarga de recoger todos los elementos dañinos del ambiente. Pero no, lo que sucede durante los años es que las colillas van siendo arrastradas hacia las alcantarillas y es cuando éstas se mezclan con el agua cuando los problemas con la fauna comienzan a aparecer.
Las colillas de cigarro representan más del 25% de basura en las playas. Cuando un filtro llega a los ríos y mares, y hace contacto con el agua, todos los residuos peligrosos son soltados. Y es importante mencionar, que una colilla puede llegar a contaminar hasta ocho litros de agua.
Si un animal marino consume agua que estuvo contaminada por colillas, puede contraer enfermedades e inclusive morir. También sucede con los animales en el exterior, comúnmente los pájaros confunden las colillas con comida y se tragan miles de componentes químicos que pueden matarlos en cuestión de dos horas.
La solución utópica sería que los humanos dejáramos de consumir cigarros, pero la solución realista es siempre depositarlos en ceniceros o basureros. Si no encuentras algo similar mientras vas en el coche o cuando caminas, entonces apágalo y guárdalo para tirarlo más tarde. No optes por la alternativa sencilla de aventarlo en la calle, pues esta decisión afectará a cientos de organismos durante muchos años. Sé consciente y deja de ser una amenaza para la biodiversidad.
De acuerdo con una iniciativa presentada este martes 3 de septiembre por la diputada Alessandra Rojo de la Vega, del Partido Verde, prevé una sanción de hasta 16 mil 898 pesos en contra de quienes tiren las colillas del cigarro en la calle.
La iniciativa que busca reformar la Ley de Residuos Sólidos, la multa por tirar colillas en la calle no solo se aplicará a los fumadores, ya que también se prevén obligaciones para establecimientos mercantiles y para las oficinas de gobierno. La propuesta del Partido Verde señala que los establecimientos mercantiles y las oficinas de gobierno deberán colocar contenedores para depositar las colillas en el exterior o en lugares destinados para fumar.
En caso de no hacer dichas adecuaciones, los establecimientos y las oficinas gubernamentales también serían acreedores de una multa por tirar collilas y la sanción podría ir de los 42 mil 245 a 168 mil 980 pesos.
La diputada señaló que la iniciativa tiene como objetivo combatir los impactos negativos que las colillas producen al medio ambiente. Rojo de la Vega explicó que se producen alrededor de cinco millones de colillas de cigarro al año en México, de las cuales solo 41% se deposita en algún contenedor o basurero, mientras que el resto, que equivaldría a 2,950 millones de colillas, se queda esparcido en las calles. “Creo que este problema está muy a tiempo de ser controlado. Los estragos ya se han empezado a sentir, pero si no hacemos nada ahora, en unos cuantos años, con toda seguridad, nos arrepentiremos”
Leave a Reply