Chalco sigue siendo un punto estratégico en la conformación del Valle de México.
Chalco proviene del náhuatl Challi: “borde de lago”, y co: “lugar”, que significa “en el borde del lago”. Aunque el significado de esta palabra ha sido muy discutido, pero lo que se sabe con certeza es que Chalco es parte del área metropolitana del valle de México.
El Lago de Chalco formaba parte del Gran Lago que comunicaba con el Lago de Texcoco, el Lago de Xochimilco, el Lago de Xaltocan y Zumpango. Aunque hoy en dìa está desecado y solo sobreviven las lagunas de Xico. Según Chimalpahin, el primer grupo en llegar a la región fueron los “acxotecas” provenienes de Tula, quienes se llamaron chalcas y fueron de los primeros gobiernos de nobles.
El segundo grupo en llegar a la región fueron los Mihuaques, que carecían de mandatarios y adoptaron los de los acxotecas; y más tarde llegaron los chichimecas teotenancas provenientes del Valle de Toluca y que pasaron por Tlahuac. En los alrededores del lago habitaron cuixocas, temimilolcas e huipanecas, quienes formaron una congregación de tribus bajo el apelativo de chalcas.
Pero en Xico los chichimecas y chalcas, de la región de la laguna, tuvieron fama de grandes agoreros y hechiceros por lo que se les llamaba atempanecas: los que viven al borde del agua. También arribaron nonohualcas, teotilixcas y tlacochalcas que se asentaron en Tlalmanalco, Amecameca; cada grupo que se asentó alrededor del lago tomó un nombre propio pero retuvo el de Chalco formando una congregación de tribus.
Con el tiempo, Chalco se convirtió en una región productiva en agricultura y partir del siglo XIV su maíz gozaba de gran fama. Para 1354, Chalco se dividió en 4 señoríos cuya denominación fue: Tlacohcalco-Chalco, Amaquemecan-Chalco, Tenanco Texopalco Tepopollan-Chalco y Chimalhuacan-Chalco. Y a la llegada de los mexicas a México-Tenochtitlan, estos se abastecen de maíz proveniente de Chalco.
Pero los chalcas fueron sometido en 1465, y se volvió tributario del imperio mexica. Los tributos eran producidos en las chinampas que se localizaban a orillas del lago.
La guerra florida entre mexicas y chalcas duró ocho años, y en ella, los nobles mexicas aprehendían a los chalcas los dejaban libres y lo mismo hacían los chalcas, de modo que sólo moría la gente en batalla; debido a esta lucha la región de Chalco Amecameca no logra el esplendor de Texcoco y Tenochtitlán.
Pero la riqueza y la fuerza militar de Chalco era fuerte, al grado que la Triple Alianza de México-Tenochtitlan, Tetzcoco y Tlacopan tardó más de dos décadas en someter la región a mediados del siglo xv, y ésta se convirtió después en un granero y fuente de madera y piedra para las grandes construcciones ceremoniales tenochcas.
Pero durante años, la historia de los orígenes de los chalcas ha sido la más compleja del valle de México. El único historiador que aborda la historia de los diferentes altépetl de Chalco es Domingo Francisco de San Antón Muñón Chimalpain Cuauhtlehuanitzin, autor de una amplia serie de obras que han sido llamadas las Relaciones y del Memorial breve acerca de la fundación de la ciudad de Colhuacan.
Por desgracia, la obra de Chimalpain no había sido traducida adecuadamente hasta hace muy poco tiempo y por lo tanto todavía no ha sido analizada ni comprendida a cabalidad.
Chimalpain presenta una visión parcial de la historia de Chalco, a pesar de eso, la riqueza informativa y explicativa de su obra es inmensa, y recoge a detalle las diferentes tradiciones históricas de al menos seis altépetl chalcas, y presenta una visión general de la conformación de Chalco en su conjunto.
El altépetl es uno de los conceptos culturales más importantes de Mesoamérica; era un territorio donde se organizaron social y políticamente los pueblos indígenas mesoamericanos; se refiere a los asentamientos humanos poseedores de un territorio, tierras y por lo general habitados por una etnia de ancestros y pasados comunes, incluida la lengua y una misma deidad protectora.
Con la llegada de Cortés, Chalco es situada como punto clave ya que ahí se dieron los encuentros entre los emisarios mexicas con los ejércitos españoles, además de ser puesto de abastecimiento de víveres y accesorios útiles para los europeos. Chalco se convierte en aliado de estos para sacudirse el asedio de los xochimilcas, pueblos de Tlahuac y de los Mexicas, participando en las incursiones militares que ponen fin a la hegemonía azteca.
Al culminar la caída del imperio mexica, Chalco se promulga Provincia Real de Chalco; siendo de gran importancia por ser un área productora de maíz, trigo, cebada, paja, leña, carbón, frutas, legumbres, materiales de construcción como madera, tezontle y piedra.
Hoy en día, el municipio de Chalco cuenta con 310 130 habitantes, es muy conocido por sus famosos quesos y crema; además de su Parroquia de San Santiago Apóstol, una de las primeras iglesias fundadas por el destacado misionero franciscano Martín de Valencia, que data del siglo XVI; también cuenta con el Museo Arqueológico de Chalco, además de sus actividades.