Ramón: el frondoso árbol mexicano que puede transformar nuestro país

Con este árbol es posible combatir el hambre y el cambio climático.

 

El árbol Ramón es uno de los alimentos favoritos de venados, jabalíes y cerdos pelones; además, si se comprimen sus hojas para hacerlas alimento, también es un producto comestible, orgánico y sin pesticidas, para cabras, el ganado bovino, gallinas y conejos, con un costo mucho menor al de la alfalfa fresca.

El Ramón es un árbol que prolifera en buena parte del territorio nacional, pero pocas personas conocen su papel ecológico, usos tradicionales, y sobre todo, su potencial como base de alimentación pecuaria, humana y su capacidad proveedora de biocombustible para la generación de energía.

 

 

El investigador emérito del Sistema Nacional de Investigadores y miembro del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República, Alfonso Larqué Saavedra, dejó atónitos a ante a académicos, empresarios y representantes de asociaciones civiles, gubernamentales y legislativas presentando los resultados de sus investigaciones a lo largo de siete años de trabajo en el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY).

El Ramón es un gran ejemplo del impacto que tiene la ciencia y las ideas innovadoras entre sectores que no apreciamos como sectores generadores de ciencia. El ramón requiere cinco años producir semillas en condiciones naturales, pero una vez que llega a ésta etapa produce entre 95 y 100 kilogramos por año; sin embargo, en 2014 alcanzó un total de 145.6 kilogramos de semilla por árbol.

 

 

Este  árbol también contribuye a evitar el cambio climático debido a sus propiedades, como su gran capacidad para retener el dióxido de carbono, y levantar grandes capas de suelo para sobrevivir incluso en tierras desertificadas. Además, el Brosimum alicastrum también contribuye a la preservación de la fauna en selvas, debido a lo frondoso de su follaje y que cuenta con buena resistencia ante sequias.

Es un árbol que tiene un bajo costo y la gran cantidad de follaje, es una gran opción para evitar la pobreza y el hambre, pues cada tonelada del follaje de este árbol puede costar hasta 500 pesos. Florece dos veces al año, con una producción anual de 100 toneladas de semilla.

 

 

El fruto de este árbol puede alcanzar los 45 metros de altura lleva el nombre de “nueces” y se caracteriza por tener un sabor dulce, parecido al de las castañas; mientras que las semillas pueden tener diversos usos y combinarse con otros productos como maíz para elaborar tortillas o harina para hacer pan, o tostarse y usarse como un sustituto del café.

Con el follaje del ramón es posible hacer hojuelas a partir del fruto, muy parecido a los corn flakes para los animales. Este producto se llama Maya Óox , y básicamente se transforman semillas en harina que tiene una cantidad de carbohidratos, por arriba de 70 por ciento  y un 13 por ciento de proteínas.

 

 

Asimismo, contiene cantidades considerables de minerales como calcio, zinc, magnesio y potasio, así como vitaminas y ácido fólico. Otro factor importante que han descubierto los investigadores, es que la cantidad de coliformes, hongos y patógenos que puede presentar la harina de ramón, no representa ningún riesgo para la salud.

La harina Maya Óox es libre de gluten y un producto de alta calidad consumible para las personas que padecen la enfermedad celíaca. Además, es un competidor comercial con las tres principales marcas de harina sin gluten que existen en España e Italia; pero tras realizar estudios comparativos, las marcas comerciales europeasno le llegan ni a los talones, en cantidad de fibra, proteína y antioxidante, al Maya Óox.

 

 

Además, se ha descubierto que sembrar una plantación de 400 árboles en una hectárea, equivale a levantar 92 toneladas de follaje por año. Adquirir una hectárea del árbol ramón tiene un costo de 40 mil pesos que, divididos entre 92 toneladas, dan un total de 435 pesos la tonelada de biomasa fresca del follaje del ramón.

Esto significa, que plantar unas 600 mil hectáreas del árbol, generaría 10 millones de toneladas de harina de ramón que servirían para surtir todas las necesidades del sector pecuario en el país.

 

 

De acuerdo con las investigaciones realizadas, una plantación de esta magnitud sería suficiente para alimentar a todo el país o, por lo menos, al sector pecuario. Así que Yucatán tiene un proyecto que puede ser transformador al país, y ayudar a reducir la lucha contra el hambre, cambiar la perspectiva de un país que tiene 50 millones de pobres.

Foto destacada El sol de México