San Carlos ha visto pasar por sus aulas a destacados arquitectos y artistas.
El edificio histórico de La Academia de San Carlos fue levantado sobre el Antiguo Hospital del Amor de Dios y remodelado en su aspecto actual a mediados del siglo XIX. Hoy en día, pertenece a la Universidad Nacional Autónoma de México, y alberga a la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Artes y Diseño.
En el año de 1781, fue fundada bajo el nombre de la Real Academia de San Carlos de las Nobles Artes de la Nueva España, por el entonces Rey de España, Carlos III y a petición de las autoridades de la Casa de Moneda de la Nueva España, quienes veían en dicho fin principal el establecer una escuela de grabado en el entonces virreinato novohispano.
Este edificio también fue el primer museo de arte que se inauguró en Latinoamérica. En sus instalaciones impartieron clases y estudiaron los más prestigiosos arquitectos, pintores y escultores del país educados bajo los modelos que predominaron en su momento. Las clases comenzaron a ser impartidas por Jerónimo Antonio Gil.
En 1858, el arquitecto italiano Javier Cavallari renovó la antigua construcción basándose en modelos renacentistas, utilizando en la fachada el almohadillado, ventanas adoveladas y medallones. En este lugar han convergido los artistas más importantes del país.
San Carlos se basó en los principios de enseñanza del arte neoclásico del siglo XVIII: la revisión y estudio de los tratados de Vitrubio, la obra de Johann Joachin Winckelmann, arqueólogo alemán a quien se considera el padre de la historia del arte y la influencia clásica que se desató en torno a los descubrimientos de las ciudades romanas sumergidas por la erupción del Vesubio, Herculano y Pompeya en Italia.
Como el arte neoclásico enaltece el arte griego, su simplicidad y sobriedad de formas, La Academia de San Carlos se ligó a la estética griega a través de los artistas españoles que arribaron para su fundación en la Ciudad de México. Se constituyó como el producto del racionalismo iniciado en el siglo XVII y desarrollado en el XVIII.
Los primeros maestros optaron por los temas históricos y por la creación de obras para su exhibición en público, trabajando en el dibujo de anatomía humana. El estudiante asistía a clases de teoría del arte, letras, historia y matemáticas. Los directores de escultura y pintura fueron Manuel Tolsá y Rafael Ximeno. Este lugar constituyó el inicio del arte moderno en México ya que rechazó el arte barroco, estilo ya descontinuado en Europa.
El tipo de arquitectura que se pretendió enseñar en un momento fue sobre grandes teóricos y estetas de este arte como Vitruvio, Vignola, Piranesi y otros grandes arquitectos; pero los profesores de México solicitaron publicaciones de Dibujo de Monteas, Cálculo de Arcos y Bóvedas, Técnica de la cimbra y del andamio, Sistemas constructivos. Gracias a estas peticiones y a una gran perspicacia de los maestros y alumnos, con el deseo de ser creadores independientes, de 1810 a 1821 se seguirá la influencia por la cultura hispana y otras expresiones europeas.
En 1858 Javier Cavallari mejora el Plan de Estudios de Arquitectura, para que el alumno aprenda Ordenes Clásicos y conocimientos de proyecto y construcción. Llega de Italia Eugenio Landesi, y el mexicano José María Velasco. En 1929, año de la autonomía de la Universidad Nacional de México, se divide oficialmente en Escuela Central de Artes Plásticas y Escuela Nacional de Arquitectura (”Academia de San Carlos” de hecho sigue vigente).
En 1948, Enrique del Moral hace un ajuste al Plan de Estudios y para 1953 la Escuela de Artes Plásticas de San Carlos, emigra hacia Ciudad Universitaria; la Escuela Nacional de Arquitectura se vuelve Facultad de Arquitectura. El Museo de San Carlos pasa al INBA y el edificio de la Academia queda para los posgrados de la Escuela Nacional de Artes Plásticas, mientras que las licenciaturas son trasladadas a Xochimilco.
La Academia tuvo una gran influencia en el arte mexicano, pero también las construcciones, la valuación de obras, la biología, la agrimensura o la historiografía. Durante el siglo XX muchos artistas están vinculados a la institución: Rivera, Orozco, Siqueiros, Tamayo, Hersúa, Felguérez y muchos artistas más de prestigio internacional egresaron de la institución e inclusive se desempeñaron en ésta como profesores en algún momento.
Academia de San Carlos
Dónde: Academia 22 esquina con la Calle de Moneda Centro Histórico.
Cuándo: lunes a viernes de 9:00 a 18:00 hrs.
Entrada libre