¿Cómo hacer para ir al supermercado y minimizar el riesgo de contagio? Esta lista de pasos para hacer la compra en cuarentena tal vez te ayude a lograrlo.
Estamos en tiempos extraños. La pandemia del coronavirus nos ha obligado a modificar drásticamente nuestras rutinas y a ajustar nuestros hábitos. Todo ha cambiado: nuestras relaciones, nuestra manera de movernos, nuestro día a día. Actividades tan simples como ir al supermercado o salir a la calle por algo pequeño se convierten en verdaderas odiseas. Tenemos que tomar en cuenta precauciones que nunca antes se nos habrían imaginado. La cuarentena nos obliga a ser altamente precavidos, y no siempre es fácil saber cómo hacerlo. Tal vez esta breve guía de cómo hacer la compra te ayude:
Hacer una lista extensa, minuciosa y clara
Antes de salir, es muy importante que sepas qué vas a comprar. Checa todos los cajones, la alacena, el refri y demás habitaciones para saber exactamente qué necesitas. Organiza tu lista para que hagas todo en un mismo viaje y no tengas que estar regresando por cosas que se te olvidaron. Piensa bien qué es lo que vas a comer durante la semana, para que no te falte nada después. Compra en gran cantidad, para extender el tiempo entre salida y salida lo más posible.
Ir a lo que vas; no perder tiempo
Imagen de: Washington Post
De la casa al súper y del súper a la casa. No te entretengas en el camino, a menos que necesites forzosamente pasar a algún otro establecimiento. Haz lo que tengas que hacer y regresa. Si te encuentras a algún conocido, salúdalo “de lejitos” y sigue; ya podrán platicar después por redes sociales. No te entretengas ojeando los productos del supermercado; si hiciste tu lista con detenimiento, no habrá necesidad de que deambules por los pasillos. Tampoco dudes demasiado entre una marca u otra; ve directamente por la conocida, por la que más te gusta.
Utilizar las prendas adecuadas
Lo más importante es llevar cubrebocas y guantes. A pesar de que el cubrebocas no es una medida estrictamente necesaria, muchos estados ya la han hecho obligatoria. Sobre todo, sirve para la gente que está enferma, ya que su capacidad de contagio disminuye al usarlo. Los guantes también evitan que tus manos toquen superficies ajenas; después de hacer la compra y regresar a tu casa, deséchalos. Fuera de esto, puedes vestirte como quieras.
Desinfectar tus manos antes de entrar
Muchos supermercados, mercados y demás expendios de víveres tienen desinfectante o gel antibacterial a sus entradas. Asegúrate de ponerte antes de entrar, y al salir también. En general, también se están desinfectando los carritos y canastas; solamente agarra los que sepas que están listos para usarse.
De preferencia, llevar bolsas de tu casa
La ventaja de este punto es que no tienes que llevar artículos innecesarios y de procedencia desconocida a tu casa, como lo son las bolsas de súper. Si tienes bolsas del mandado, siempre están en tu casa, por lo que no son fuente de contagio. Eso sí, lávalas o desinféctalas cuando regreses.
Mantener la sana distancia y hablar poco
Imagen de: coronavirus.gob.mx
Se sabe que cuando uno abre la boca para hablar, minúsculas motas de saliva salen disparadas hacia afuera; por ello, mantén la comunicación al mínimo. Solamente habla para lo que sea estrictamente necesario, y no te entretengas conversando. Otra de las medidas vitales es la sana distancia. No abarrotes las entradas, salidas o las cajas. Realiza tu compra con calma, pero con precisión. Si ves que hay mucha gente en la zona de frutas, por ejemplo, pasa por lo demás y regresa en otro momento. Cuando vayas a pagar, no te desesperes si ves que las colas son grandes; lo más importante es mantener el metro y medio de distancia y esperar a que llegue tu turno.
Desinfectar todo al llegar a casa
Finalmente, la cuarentena dicta que todo objeto ajeno a tu casa sea desinfectado al entrar. Todos los productos, tanto comestibles como de otro tipo, deben pasar por agua y jabón o por desinfectante. Las bolsas del mandado, lavarlas. Las bolsas donde van frutas y verduras, también. Tus manos, ni se diga. También asegúrate de lavar el dinero o las tarjetas; el primero suele pasar por muchas manos antes de llegar a ti. Por último, es recomendable que la ropa que utilizaste la metas a lavar y que tú te des un regaderazo.
Si sigues todas estas recomendaciones al pie de la letra, el riesgo de contagio se reduce drásticamente. Es importante que la cuarentena se acate, para protegerte a ti y a los tuyos. Sin embargo, tampoco salgas con miedo a la calle: no hay necesidad de que sea una experiencia desagradable, simplemente hazlo con decisión, rapidez y precisión.
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