Nepohualtzin: la computadora de las civilizaciones prehispánicas

El Nepohualtzin ayudaba a ejercitar el cerebro y comprender las operaciones matemáticas.

 

El Nepohualtzintzin es un instrumento de cálculo de origen prehispánico, utilizado por las culturas olmeca, maya y mexica.​ Puede ser empleado con el sistema vigesimal o el decimal, y se ha adaptado su uso para el sistema del ábaco japonés Soroban.

Su nombre proviene de los vocablos en náhuatl nepóhuatl (la cuenta) y tzintzin (venerable), por lo que su significado literal es la cuenta venerable. Otra acepción es que proviene de los vocablos en náhuatl ne (personal); pohual o pohualli (la cuenta); y tzintzin (pequeños elementos semejantes). Bajo esta etimología, la palabra significaría “cuentas de pequeños elementos semejantes por alguien”.

 

Neomexicanismos

 

Más allá de los vocablos, la creación del ábaco Nepohualtzintzin se atribuye a los mayas, quienes lo emplearon para hacer sus operaciones matemáticas fundamentales, aunque se han encontrado piezas muy antiguas que se atribuyen a los olmecas. También se han hallado grabados y pinturas sobre el ábaco, así como variantes de oro, jade y concha.

El Nepohualtzintzin fue adoptado posteriormente por los mexicas. Este ábaco está compuesto por un conjunto de cuentas alineadas en 13 hileras. Cada hilera tiene siete cuentas, para un total de 91 en todo el ábaco. La parte superior presenta tres cuentas, que representan cinco unidades cada una; la parte inferior tiene cuatro cuentas; cada una con valor de una unidad.

 

Neomexicanismos

 

La justificación de este número son los ciclos de agricultura: 91 días equivalen aproximadamente a una cuarta parte del año (una estación); mientras que el ciclo del maíz es de 182 días (el doble de 91).

En la actualidad, el Nepohualtzintzin se comenzó a utilizar desde 1996 en planteles de educación primaria en México. En 2009, la Secretaría de Educación Pública publicó la Guía Didáctica del Nepohualtzitzin para el Desarrollo de las Competencias Matemáticas.

 

Revista UNAM

 

Se ha reportado que en las escuelas primarias donde se utilizó el Nepohualtzintzin, los alumnos tienden a obtener menos puntajes en las categorías de elemental e insuficiente; los grupos obtienen progresivamente mejores resultados en matemáticas, equivalentes o superiores a las calificaciones promedio a niveles estatal y nacional.

En México, este ábaco ha sido empleado en la enseñanza de competencias matemáticas en niños con discapacidad visual, ayudando a desarrolla habilidades de memoria, concentración, razonamiento lógico, entre otros.

 

Revista UNAM

 

En este instrumento, también conocido como nepo, no es necesario usar ni papel ni lápiz pues todo se hace de manera natural. Es una cuestión de armonía, paz y salud, no de buena suerte, ni de magia. Debido a la gran cantidad de operaciones, se puede decir que el nepohualtzintzin es comparable con una computadora moderna.

El sistema matemático del nepohualtzintzin surgió de la necesidad de sobrevivencia de nuestros antepasados; quienes, para cultivar la tierra, tenían que contar los días, los fenómenos de la naturaleza y sus ciclos y observar, por ejemplo, que el Sol, aparece día a día por el Oriente recorre el cielo hasta ocultarse por el Poniente.

 

 

Se podría considerar que el uso del nepo es una excelente forma de ejercitar el cerebro, manteniéndolo activo y ágil a cualquier edad. Es uno de los pocos aparatos que estimula el mayor número de sinapsis (contactos neuronales) entre ambos lóbulos cerebrales simultáneamente, además de promover el desarrollo de la motricidad fina.

 

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