Muchos sitios colmados de historia existen en la CDMX, pero quizá Talelolco es uno de los más poderosos. Aquí vivió una tribu rebelde, que separándose de los mexicas, los tlatelolcas, formaron el tianguis más grande que jamás haya existido en Mesoamérica.
Hoy es un espacio entre ruinas arqueológicas; ha sido el escenario de capítulos entristecedores de la historia de México, pero incluso en la tristeza, el arte es capaz de mutar esos sentimientos a los de reflexión y pertenencia…
Como parte del proyecto de Ciudad Intervenida, en el que artistas digitales reconvierten la manera en que vemos y experimentamos espacios cotidianos de la ciudad, Tlatelolco ha sido reinterpretado desde su historia y en una muestra estética sobre cómo las personas siguen apropiándose cotidianamente de este sitio milenario.
Una montaña digital integra los extremadamente disímiles elementos arquitectónicos de Tlatelolco; atletas mágicos y fluorescentes flotan en memoria de las Olimpiadas del 68; globos ¿u hongos? crecen desde sus colores en las paredes del lugar.
El combo final invita a respirar los claroscuros de una historia que nunca termina; la belleza de la nostalgia en la esperanza de un futuro, y la armonía del presente en un mismo espacio.
Twitter de la autora: @anapauladelatd
Leave a Reply