Las mejores zonas para ver pinturas rupestres en todo el continente americano.
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Se le denomina Cuadro Rupestre a la zona mexicana que agrupa la mayor cantidad de sitios con grabados en piedra de América. Se encuentra en el noreste de México, donde se concentra la mayor cantidad de sitios con grabados en roca y quizás del continente americano.
México cuenta con una gran variedad bien conservada que es muestra de la identidad milenaria y perpetua de sus habitantes. Este arte ha sobrevivido sobre la tierra por miles de años, y se han localizado yacimientos prácticamente en todo el territorio nacional, aunque debido a las condiciones climáticas el arte rupestre que más se ha conservado se ubica en el norte del país.
Se tienen registrados más de 3 700 yacimientos con pinturas o grabados. También ha calculado que aproximadamente el 70 % de los sitios arqueológicos del norte de México resguardan elementos de arte rupestre.
Y aunque este arte ha sobrevivido sobre la tierra por miles y miles de años, se encuentra en todo el mundo y México tiene una de las mejores exposiciones en todo nuestro continente.
El primero de ellos se encuentra en la Cueva de San Borjitas, Sierra de Guadalupe, BCS. Aquí, puedes ver las pinturas o dibujos que se encuentran en rocas o cavernas. Se estima que el panel de San Borjitas tiene una antigüedad de cerca de 7 mil 500 años.
Otras zonas importantes donde existen manifestaciones rupestres son La Pintada, Las Flechas, La Música, La Soledad, Boca San Julio, Cuesta Palmarito y El Ratón. Debido a la importancia de estas pinturas, y por la constancia que hacen de la existencia de una cultura milenaria, fueron incluidas en 1993 en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Coahuila tiene algunos sitios arqueológicos rupestres como la Cueva Pinta (ubicada en El Sobaco, entre los municipios de San Pedro de las Colonias y Cuatro Ciénegas), El Hundido y El Junco, en la Sierra de la Fragua.
También destaca la Cueva de la Candelaria, una de las cuevas mortuorias más importantes de México. Se estima que estos sitios datan de diversas épocas que van, por lo menos, desde hace 10 mil años hasta el virreinato.
En el Valle de Tlacolula, en el estado de Oaxaca, hay dos vestigios prehispánicos y una serie de cuevas prehistóricas y refugios rocosos de ocupación humana, mismos en los que han sido encontrados rastros de arte rupestre en el que se pueden observas figuras humanas, fauna, flora y figuras abstractas en tonos rojos.
En este sitio existe evidencia de la domesticación prehistórica de diferentes especies de plantas, pues en la cueva de Guilá Naquitz se han encontrado semillas de calabaza que datan de hace 10 mil años, lo cual representa que son los restos más tempranos de plantas domesticadas descubiertos hasta la fecha en el continente americano.
Las pinturas rupestres de la Sierra de San Carlos, en el municipio de Burgos, en el estado de Tamaulipas, se han encontrado cerca de 5 mil pinturas rupestres realizadas por grupos de cazadores o recolectores de la región. Las piezas fueron halladas en el interior de oquedades y cañadas de la Sierra de San Carlos.
Las pinturas plasman figuras antropomorfas, zoomorfas, astronómicas y abstractas. Según explicaron investigadores, la importancia de su hallazgo radica en que gracias a ellas se ha podido documentar presencia de grupos prehispánicos en Burgos, donde se crecía que no había presencia humana.
Foto destacada INAH