Esta ciclovía inteligente en Chapultepec es la primera en América Latina y el tercer piloto a nivel mundial.
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La nueva ciclovía inteligente del Bosque de Chapultepec: está hecha de residuos plásticos y se ubica en la segunda sección del Bosque de Chapultepec, fabricada con tapas de botella y se adapta a diversas condiciones climatológicas.
Las Secretarías capitalinas de Medio Ambiente (Sedema) y de Movilidad (Semovi), fueron los que inauguraron esta nueva ciclovía inteligente en la segunda sección del Bosque de Chapultepec.
La nueva pista está fabricada con 1,000 kilos de residuos plásticos equivalentes a medio millón de tapas de botella y que se adapta a las diversas condiciones climatológicas de la capital.
Por medio de un comunicado, el Gobierno de la Ciudad de México informó que se trata del primer piloto de Plastic Road y Orbia en América Latina y el tercero a nivel mundial, un proyecto holandés que se dedica a la arquitectura urbana con desechos plásticos.
Las autoridades locales resaltaron que la durabilidad de la ciclovía, así como su mínimo mantenimiento permiten disminuir las emisiones hasta en un 72% durante su vida útil, en comparación con estructuras viales tradicionales de pavimento.
“El diseño modular permite el almacenamiento temporal de agua y también su drenaje, por lo que es ideal para promover el almacenamiento de agua durante la temporada de lluvia extrema y evitar inundaciones”, se explica en el comunicado.
Al permitir lluvia en el subsuelo, se reduce el impacto negativo de los periodos de sequía en el área e integra tecnología de sensores para monitorear el clima. Esta pista es una iniciativa que combina la idea de buscar una movilidad sustentable en la ciudad con la idea también de reciclar plásticos, de convertirlos a materiales reutilizables y que construyan nueva infraestructura para la ciudad.
Los beneficios del proyecto radican en que reduce la probabilidad de que haya encharcamientos, reduce las necesidades de mantenimiento y puede dar un viaje más cómodo y seguro.
También se está trabajando sobre el proyecto de la ciclovía de Insurgentes, de tal manera que quede de forma permanente y ya iniciado con un rediseño poder llevarlo a cabo, para que realmente quede integrado con el Metrobús y con el transporte privado.
Marina Robles García, titular de la Sedema, recordó que hace dos años, la Jefa de Gobierno, presentó el programa de Medio Ambiente y Cambio Climático en el cual planteó una serie de líneas estratégicas que incluyen el desarrollo de proyectos integrales en el que participan distintas áreas del Gobierno de la Ciudad.
El primer piloto de esta ciclovía inteligente se lanzó en septiembre de 2018, la cual tuvo una longitud de 30 metros en Zwolle, Países Bajos. Así que estamos presenciando una obra de gran nivel de diseño, movilidad, ecología y sostenibilidad.
Indicó que esta iniciativa que combina la idea de buscar una movilidad sustentable en la ciudad con la idea también de reciclar plásticos, de convertirlos a materiales reutilizables y que construyan nueva infraestructura para la ciudad.
Foto destacada Orbia
