El Mixtón fue la rebelión indígena más grande de la época colonial

El Mixtón ha sido de las batallas más impresionantes de nuestra historia.

 

. . .

 

Esta gran batalla fue librada fuera de la gran Tenochtitlán, donde pueblos más pequeños que el imperio azteca defendieron sus tierras, empezando por retiradas a los espacios sólo accesibles para los lugareños hasta llegar a acciones de hostigamiento para correr a los primeros colonos.

La insurrección comenzó en un temprano 1532 en la Nueva Galicia, hoy Guadalajara y Nayarit, cuando los originarios de Ahuacatlán, Compostela y Chiametla se levantaron en armas para luego huir para sobrevivir, inspirando otros levantamientos.

 

Relatos e historia

 

A partir de ese año múltiples y continuas muestras de inconformidad fueron expresadas por los pueblos originarios, los primeros cuatro gobernantes del territorio lidiaron con los rebeldes, pero al tercero, Cristóbal de Oñate, experimentó la sublevación más peligrosa de la época colonial, la batalla del Mixtón.

En la Nueva Galicia de 1540 eran pocos los habitantes españoles los que podían resistir los levantamientos indígenas, razón de sobra para que Oñate pidiera ayuda inmediata al virrey novo español, Antonio de Mendoza.

 

La Crónica de Jalisco

 

La zona cazcana (sur de Zacatecas) era la más dura para los conquistadores, aún no se había podido imponer el vasallaje cuando los indígenas dejaron de pagar tributo y se negaron a ser evangelizados.

Los distintos puntos de rebelión no actuaban de manera improvisada, pero si al calor de la injusticia, estos grupos seguían una clara estrategia, se fortificaban en un punto escarpado para después descender a cualquier punto con cristianos.

 

Imágenes Históricas

 

Desde Durango, la rebelión se había extendido con la firme convicción de vencer o fallecer, así que encabezados por Tenamaxtli, millares de indígenas se reunieron en el Mixtón, un peñón que también llamaron “cerro del gatito” porque al ser tan escarpado solo los felinos lo podían subir.

Era 9 de abril de 1541 cuando a la propuesta de paz siguió un ataque tan fuerte que de no haber huido ese día hubieran muerto todos los soldados que acampaban a las faldas del Mixtón. El plan era apoderase de la Nueva Galicia para después tomar Michoacán y luego la Ciudad de México.

 

Pacarina del Sur

 

El virrey en turno, Antonio de Mendoza no tuvo más que recurrir al famoso capitán Pedro de Alvarado, quien desde Zapotlán dio inició a un plan para frenar el avance de las rebeliones y luego llegar a los pies del Mixtón.

Con la altanería que lo caracterizaba, Alvarado comenzó el asenso a la batalla pese a las advertencias de Oñate. Era 24 de junio de ese año cuando el capitán español perdió ante Tenamaxtli (líder de Nochistlán), Pantecatl (caudillo de la zona de Xalpa), Xiuhtecuhtli y Tenquitatl (del cañón de Juchipila).

 

Estatua dedicada a Tenamaxtle

 

Aquella derrota tuvo como consecuencia la muerte de Alvarado, peleas entre los propios indígenas (había algunos que se aliaban a los españoles) y una fuerte represión que consistió en rodear el Mixtón, cortar el suministro de agua y ofrecer recompensas.

El virrey prometió una recompensa en esclavos a los capitanes que alcanzaran la cima del cerro, lo que lograron hasta el 16 de diciembre de 1541 a través de un paso que los condujo al campamento donde se desató la última batalla.

 

 

Historias y relatos

 

En ese día en el que los rebeldes perdieron, algunos se lanzaron a los precipicios, otros terminaron en los árboles, algunos terminaron sin cuello y los pocos sobrevivientes fueron enviados a los perros de los españoles.

El gran rencor de Mendoza persistió terminada esta batalla, hubo repercusiones contra la gente que escondía a los indígenas, y algunos pudieron contar la historia pero muchos no pudieron alzar la voz.

Foto destacada Historiando.org