Las cuevas prehistóricas de Yagul y Mitla: el vínculo del hombre y la naturaleza

Foto destacada: INAH

Las Cuevas de Yagul y Mitla son un recorrido a la prehistoria humana en América.

 

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En el Valle de Tlacolula en Oaxaca, existen dos conjuntos arqueológicos prehispánicos y una serie de cuevas prehistóricas y refugios rocosos donde se han encontrado vestigios de arte rupestre: el testimonio de la vida de los primeros agricultores en Oaxaca.

En la cueva de Guilá Naquitz se han hallado semillas de 10.000 años de antigüedad, que forman los restos tempranos de plantas domesticadas descubiertos hasta la fecha en el continente americano, así como fragmentos de espigas de maíz que son uno de los más antiguos testimonios de la domesticación de esta planta.

 

 

Las cuevas de Yagul y Mitla han sido declaradas por la UNESCO como Patrimonio Mundial; es uno de los lugares más interesantes del país, que integran las cuevas prehistóricas donde se conserva el arte rupestre de una enorme antigüedad.

La relevancia cultural de este sitio, como la Cueva Blanca y Gheo Shih, se ha logrado identificar vestigios de animales prehistóricos, del periodo pleistocénico y herramientas de piedra que posibilitaron el estudio de los hábitos de vida y medios de subsistencia de las comunidades de recolectores-cazadores de esta zona de Oaxaca de hace milenios.

 

 

Otras de las cuevas prehistóricas de los Valles Centrales de Oaxaca, son: Silvia, Blanca, El Candelabro, Caballito Blanco, La Paloma y Los Mochines. Estas maravillas geológicas de Oaxaca, son Patrimonio de la Humanidad desde agosto del 2010.

Estas cuevas demuestran la transición de hombres primitivos que habitaban en cuevas, a poblaciones que edificaron las primeras ciudades prehispánicas, en donde se han encontrado refugios rocosos con materiales culturales que se remontan a miles de años.

Desde la década de 1960, el arqueólogo estadounidense Kent Flannery realizó el hallazgo de la evidencia más temprana de la domesticación de las plantas en América, entre ellas el cultivo de la calabaza, cuya antigüedad es de 10,000 años.

 

 

Este legado biocultural fue alentado por al artista plástico Francisco Toledo dijo que había que “investigarlo y conservarlo”. El doctor Alejandro de Ávila Blomberg, director del Jardín Etnobotánico de Oaxaca, han realizado recorridos que los llevaron a cuevas y parajes sumando gran cantidad de interesados en la conservación de este gran espacio prehistórico.

Las cuevas prehispánicas de Yagul y Mitla son un gran paisaje cultural; es decir,  un sitio donde los elementos natural y cultural no son aspectos separados sino uno mismo. Además de las cuevas principales, existen tres áreas protegidas más de esta región bajo el rubro de áreas destinadas a la conservación, que llegan a cerca de las 10,000 hectáreas.

 

 

Esta superficie cubre la parte que está definida en el expediente de la UNESCO como zona núcleo, una región más amplia donde se han registrado especies en peligro de extinción, que estaban documentadas en las cuevas a través de las pinturas rupestres como el venado cola blanca, el jaguar y el puma.

Además de las cuevas prehispánicas de Yagul y Mitla, existen los sitios arqueológicos del Corredor Arqueológico del Valle de Tlacolula, en la parte operativa del Centro INAH Oaxaca; un sitio que se ha consolidado los vínculos de colaboración con las autoridades ejidales, municipales e institucionales para el resguardo de este sitio.

 

 

Las comunidades en esta zona de Oaxaca, ha trabajado en la capacitación, sensibilidad hacia la parte del patrimonio cultural de las cuevas de Yagul y Mitla. También, el Ayuntamiento de Tlacolula de Matamoros ha tenido un papel importante en la difusión, organizando diversas exposiciones temporales que se han presentado en el municipio y en la zona arqueológica.

La iniciativa de la UNESCO ayuda a fomentar este mismo estudio y por ello resulta sumamente valiosa para comprender los inicios de la civilización en México y en general en todo el continente americano.

 

 

Cuevas prehistóricas de Yagul y Mitla

Dónde: Valle de Tlacolula, en el estado de Oaxaca.

Cuando: todo el año

Entrada libre