Foto destacada: Secretaria de Cultura y Turismo
El Palacio de Tepantitla contiene el documento médico más antiguo de México.
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Detrás de Teotihuacan se encuentran unos bellos murales de hace 1600 años descubiertos durante la década de los años 40 cuando se empezó a explorar la zona circundante a las pirámides del sol y la luna fue ahí donde se descubrieron los restos de un conjunto residencial que contenía una serie de murales pintados alrededor del año 450, uno de esos edificios es el conocemos hoy como Palacio de Tepantitla.
El Palacio de Tepantitla
El Palacio de Tepantitla se encuentra al noreste de una de las pirámides más famosas de México, la Pirámide del Sol en la localidad de San Francisco Mazapa a unos 500 metros de la puerta 4 de la pirámide, se trata de un conjunto arqueológico que a simple vista pasa desapercibido sin embargo en su interior resguarda el documento médico más antiguo de México.
Originalmente se trataba de un conjunto departamental construido entre los años 450 y 650 a. C. tiempo en el que se consolidaron este tipo de viviendas para la clase alta de Teotihuacán, las áreas habitacionales contaban con templos y adoratorios que circundaban a los patios abiertos. El Palacio de Tepantitla perteneció a este tipo de construcciones elegantes probablemente por eso posee un fresco exquisito.
El mural del Palacio de Tepantitla
El mural del Palacio de Tepantitla muestran una mayor variedad de colores como ninguna otra muestra similar encontrada en la zona, asimismo, la intensidad de los colores es inusual lo cual aumenta el valor del fresco muestra en su conjunto lo que parece ser el Tlalocan, razón por la que se le ha llamado así.
El mural de Tlalocan muestra una representación del paraíso de Tlaloc quien pareciera estar a centro del fresco, pero en resientes investigaciones se ha definido que se trata de una figura femenina, la Diosa de Tepantitla, una diosa de carácter acuático o en su defecto se trata de una deidad menor de la lluvia.
Mural de Tlalocan
También se ha dicho ya que además de la diosa se aprecia el emblema de Tlaloc en un marco que han llamado “la cueva de la plataforma-montaña”, todos los elementos en conjunto nos ilustran un el árbol cósmico acuático, esto se deduce de las cuatro trompetas de caracol marino en el agua debajo de la plataforma-montaña que representan los cuatro rumbos del universo.
El escenario pintado sobre un intenso color rojo se relacionó al Tlalocan por coincidir con la descripción que dio del mítico lugar el misionero franciscano, Bernardino de Sahagún, donde terminaban las almas de los muertos por acontecimientos relacionados a la lluvia y el agua, un lugar de perpetua alegría entre ríos y manantiales.
En aquel maravilloso paraíso había árboles frutales y plantas, justo con este tema se pone interesante la cosa pues hay plantas que no se han podido identificar hasta hoy, las que sí se encuentran en la parte superior del Mural de Tlalocan, son casi todas de tipo alimenticio como maíz y frijol, pero también hay plantas de uso médico como hongos alucinógenos.
En la parte inferior se observan pequeñas figuras, unas parecen jugar, otras bailar y sin duda también hay algunas que nos remiten a escenas médicas, éstas y el uso de plantas como medicamentos hacen del mural del Palacio de Tepantitla el primer documento médico en México por, específicamente, dos escenas.
Tlancopinalitztli, el dentista
Dentro de toda la escena de miniaturas se ubica con facilidad un juego de pelota dibujado con dos líneas, debajo de la línea inferior de la cancha hay dos hombres. El individuo que se encuentra a la derecha porta un tocado así que seguramente pertenecía a un alto rango social, él es quien realiza lo que se conoce muy bien como un procedimiento dental prehispánico llamado limadura.
La limadura se realizaba con algún instrumento que también se ilustra, consistía en el desgaste de los dientes, procedimiento que ya se ha encontrado en cráneos durante las excavaciones realizadas en Teotihuacán, el otro individuo se encuentra hincado del lado izquierdo, es quien recibe el procedimiento dental.
El “paciente” fue dibujado con vestimentas sencillas, sobre ambos personajes aparece el glifo del canto demostrando que se encontraban serenos y felices, aparecen rodeados de plantas e insectos, a su derecha hay otra escena a la misma altura en una parte del mural que desafortunadamente ya está muy deteriorada.
Teopixqui, el sacerdote
Por lo que se alcanza a distinguir, una vez más nos encontramos ante una pareja de sujetos, uno frente a otro. El individuo de la izquierda viste tocado y nariguera, se trata de un sacerdote, se observa inclinado hacia adelante metiendo su mano derecha a la boca del otro quien no se puede ver con claridad pues su color se confunde con el de una mariposa que se encuentra junto a ellos.
En una reproducción de la imagen se ha dibujado un cuchillo de pedernal lo cual convertiría a esta imagen en otra imagen odontológica o quirúrgica, también se ha logrado rescatar el glifo sobe ellos que es de la palabra, así que trata de un diálogo. Aunque no sabemos con precisión de qué se trata la escena, llama la atención la intención de ambas parejas y su contexto, pues se encuentran en el lugar de las delicias y se les ve serenos, quizá allá en el Tlalocan ir al médico no es cuestión de sufrimiento.
Palacio de Tepantitla
¿Dónde? Zona Arqueológica de Teotihuacan, Puerta 4. San Juan Teotihuacan de Arista, Edo. Méx.
¿Cuándo? Lunes a sábado de 9 a 15 h
¿Cuánto? $80 pesos, el acceso está incluido con el boleto de ingreso a la zona arqueológica de Teotihuacán.