Foto destacada: El País
Con la exposición de las Ventanas Arqueológicas verás surgir la capital del imperio mexica.
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Unos años atrás, dos empresarios de Bélgica decidieron abrir el museo del chocolate en pleno corazón de la CDMX, y durante las excavaciones encontraron cientos de cráneos de guerreros sacrificados en el patio de la casa que habían adquirido sobre la calle Guatemala para abrir el local.
Encontraron el tzompantli principal de los mexicas: una estructura de postes y varas de madera que forman una torre de cabezas humanas. Por supuesto, el descubrimiento hizo que el INAH se adueñara del recinto porque se encontró la parte externa del monumento que los mexicas consagraron a Huitzilopochtli, su dios de la guerra.
Después de cerca de 10 años, apenas conocemos un fragmento del Huey-Teocalli del Templo Mayor: el centro absoluto de la vida religiosa mexica. El Huey-Teocalli quedó sepultado por la primera piedra que colocó Hernán Cortés hacia 1524 para edificar la imponente Catedral Metropolitana, la más grande de Latinoamérica.
Con el fin de exhibir estas piezas, se presenta el Pabellón de Ventanas Arqueológicas en la Casa del Marqués del Apartado, donde se repasan algunos de los hallazgos más importantes desenterrados y luego exhibidos en 42 rendijas, de 16 inmuebles, para observar el pasado del centro del imperio: los restos de templos y palacios mexicas, las casas solariegas de conquistadores españoles, las iglesias cristianas y hasta las residencias del gobierno virreinal.
En el Centro Histórico hay 42 ventanas arqueológicas que muestran diferentes momentos de ocupación de la zona. La mayoría son vestigios prehispánicos, aunque también hay de la época virreinal y hasta del siglo XIX.
El pabellón, inaugurado en la Casa del Marqués del Apartado, es una pequeña sala que cuenta con una maqueta interactiva, material gráfico y algunas réplicas. Se exponen, además, dos cráneos del Huei Tzompantli. Huesos con orificios a cada lado por donde se atravesaban para ser expuestos.
Las ventanas se ubican en 16 inmuebles. La más grande es la del Templo Mayor, uno de los 78 templos del recinto sagrado de Tenochtitlan, donde la ciudad tenía su centro religioso. Debajo del Centro Cultural España se encuentra el Calmécac, el colegio donde estudiaban los nobles mexicas. En la casa de empeño Nacional Monte de Piedad, hay restos de la casa que habitó por algunos años el conquistador Hernán Cortés y trazos de la universidad fundada por fray Juan de Zumárraga en 1551. Algunas son de acceso público, otras tienen la entrada restringida por cuestiones de seguridad y el resto continúan siendo investigadas, como el Huei Tzompantli, por lo que aún no pueden ser visitadas.
En esta zona también fue encontrada la escultura de la diosa Coyolxauhqui, pieza emblemática de la cultura mexica, hallada de manera fortuita el 21 de febrero de 1978, cuando una cuadrilla de la Compañía de Luz y Fuerza laboraba en la esquina de las calles de Guatemala y Argentina, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
En el Centro Histórico también se han ubicado restos de un cuarto que formó parte de la casa que habitó por algunos años el mismísimo Hernán Cortés. En el Pabellón de Ventanas Arqueológicas se muestran otros salvamentos arqueológicos anteriores a la instauración del Programa de Arqueología: restos del Templo del Sol, debajo del Sagrario de la Catedral Metropolitana; del Templo de Tezcatlipoca, en el Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Antiguo Palacio del Arzobispado y del Palacio de Moctezuma II, en Palacio Nacional.
Exposición Ventanas Arqueológicas
Dónde: Casa del Marqués del Apartado
Dirección: República de Argentina #10, Col. Centro. 06000, Centro Histórico.
Cuando: hasta noviembre. Martes, miércoles, jueves, viernes y sábados de 10:00 a 15:00
Entrada libre