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Con esta venta, Frida Kahlo rompe el record de Diego Rivera con la venta un autorretrato.
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$34,9 millones de dólares es el precio que rompe record en una subasta, por una obra de arte hecho en LATAM en general y en México en particular. El récord lo había establecido previamente una su esposo, una pieza de Diego Rivera, con quien Kahlo mantuvo una tumultuosa relación de décadas, que se vendió por $ 9,76 millones en 2018.
“Diego y Yo”
Se trata del cuadro “Diego y Yo” quien fue uno de sus últimos autorretratos. Esta obra muestra a una Frida llorosa con su esposo Rivera pintado sobre sus ojos. Fue descrita por Sotheby’s en la subasta del martes como “una de las obras más importantes de Kahlo jamás subastadas”.
Asimismo, esta pieza de Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón, también rompió el récord de una pieza de Kahlo ya que su trabajo anterior más valioso se había vendido por alrededor de $8 millones.
La venta también convierte a Diego y a mí en la segunda obra de arte más vendida de una mujer, detrás de Grass / White Flower No. 1 de Georgia O’Keefe Jimson, que se vendió por $44,4 millones de dólares. La obra de Frida fue comprada por la Colección Eduardo F. Constantini.
Constantini es un coleccionista latino que dice tener “un compromiso de larga data de apoyar el arte y los artistas latinoamericanos”, quien también fundó un museo de arte en Buenos Aires, Argentina. Terminado en 1949, Diego y yo es uno de los mejores autorretratos de Kahlo, la cual se cree es una pintura surrealista que parece aludir a una relación con la actriz María Félix, según los historiadores del arte.
Aunque, según se dice, Kahlo bromeó sobre todo este asunto en público y se convirtió en una de las primeras relaciones entre personas del mismo sexo de alto perfil en la prensa… en la prensa.
La casa Sotheby’s, colocó en la pared donde colgó el cuadro esta cita de Kahlo que describía su vida: “No creo que las márgenes de un río sufran por dejar correr el agua o que la tierra sufra porque llueve, o el átomo sufre al descargar su energía… para mí todo tiene una compensación natural”, decía la cita.
Si bien esto no es mucho para los estándares de venta de obras de arte actual, es una gran venta para Kahlo, quien se ha convertido en una de las artistas más famosas de la historia y se le atribuye haber contribuido a hacer que las obras de arte mexicanas sean reconocidas mundialmente.
A pesar de la fama actual de sus obras, gran parte del trabajo de Kahlo permaneció relativamente desconocido 1970. Sin embargo, una vez descubiertas, las piezas de Kahlo comenzaron a mostrarse en exposiciones en todo el mundo. Hoy, a los casi 70 años después de su muerte, Kahlo es reconocida como un ícono artístico, así como un símbolo para la comunidad LGBT y el feminismo.
De hecho, los detractores de las pinturas de Frida Kahlo, que los hay en grandes cantidades por cierto, suelen aceptar que sus autorretratos son de las obras con más inventiva y que reflejan mayor intensidad. Así que resulta verosímil, que haya completó varios autorretratos durante su carrera, muchos de los cuales se encuentran, por otra parte, entre sus trabajos más celebrados.
Esta pintura se subastó por última vez en 1990 por 1,4 millones de dólares. KY con esto coloca a Kahlo como una de las más pintoras más vendidas del siglo XX, por ahora, esperemos.
Su trabajo también relata su dolorosa relación con su cuerpo, discapacitado por la polio infantil y lesiones graves después de un accidente de autobús. Este cuadro fue pintado cinco años antes de su muerte y se trata de una pintura al óleo de 11,7 por 8,8 pulgadas.
Esto seguramente hará que las piezas de Kahlo se vuelvan más caras y populares, y esta de diego y yo ni siquiera es una de sus obras más famosas. A pesar de eso, en México, gran parte del arte de Kahlo es reconocida como monumento artístico, un estatus legal que impide la venta de arte mexicano prominente de los siglos XIX y XX.
Asimismo, se ha dicho que la razón de la popularidad de Frida es que es una artista que multicultural, multirracial. Ya que Frida Kahlo es hija de un judío alemán húngaro y de madre indígena. Así que su herencia personal es una fusión de razas, además de que Kahlo a menudo mostraba las diferentes culturas e influencias en sus pinturas.
También porque Kahlo se inspiró en una variedad de influencias de obras prehispánicas, europeas, orientales y por supuesto porque tenía a una serie de compañeros e influencias siempre cercanas.
