Foto destacada: Muy interesante
La historia de los mexicas es mucho más rica y compleja que la idea de una profecía.
. . .
Se refirieron a sí mismos como los mexicas. Los que vivían en su ciudad capital, Tenochtitlán, eran los tenochca-mexicas. Los mexicas formaban parte de un grupo étnico más grande conocido como nahuas, ya que justo hablaban náhuatl.
Varios mitos describen la migración de los mexicas desde Aztlán, que se cree que está en algún lugar del norte de México o del suroeste de los Estados Unidos. Los mexicas partieron de Chicomoztoc a instancias de su deidad patrona, Huitzilopochtli, a viajar para establecer un nuevo asentamiento.
El Códice Boturini muestra la migración, donde incluso se ve a Huitzilopochtli llevado a lomos de uno de los individuos que migran. Huitzilopochtli les dijo a los mexicas que buscaran una señal, un águila sobre un cactus, que les indicara dónde establecerse y el resto es leyenda conocida.
Pero a medida que desarrollaban su ciudad y ganaban más protagonismo en el Valle de México, los mexicas formaron una alianza con Texcoco y Tlacopan (Tacuba), conocida como la Triple Alianza. Así que cuando nos referimos a los “aztecas”, estamos hablando de las personas que formaron esta alianza.
Pero antes de esto, los mexicas se asentaron en Colhuacan (Iztapalapa) y se cree que algunos mexicas se casaron con varias hijas del tlatoani Coxcoxtli, y que muchas otras familias mexicas se emparentaron con diversas familias colhuas. Algunos otros mexicas se casaron con personas de Azcapotzalco.
Así que los inmigrantes se emparentaron con los habitantes de ambas ciudades y así consiguieron finalmente no sólo un linaje de gobernantes, sino dos. Esto resultó desafortunado por un lado, pero también sentó las bases para su futuro éxito y esplendor
Los mexicas le declararon la guerra a los colhuas y después se refugiaron en unos islotes en el centro del lago de Texcoco, donde fundaron el altépetl: México-Tenochtitlan. Una vez fundada la ciudad, acudieron ante sus antiguos enemigos y dominadores colhuas y les solicitaron un miembro de su familia real para que se convirtiera en el tlatoani del nuevo altépetl. El elegido fue Acamapichtli, quien fundó el linaje de los tlatoque tenochcas.
Poco después de fundada México-Tenochtitlan, los mexicas conquistaron y suprimieron la dinastía de Colhuacan, y así obtuvieron el anhelado linaje tolteca y el prestigio de ese antiguo altépetl.
Como otros linajes reales, el de México-Tenochtitlan, al que perteneció Moteuhczoma Xocoyotzin, se preciaba de su origen extranjero y prestigioso, que lo vinculaba con la gran dinastía tolteca fundada por Quetzalcóatl; paralelamente, el desaparecido linaje real de México-Tlatelolco había presumido sus vínculos con los reyes chichimecas descendientes de Xólotl.
Fue hasta que Hernán Cortés conquistó México-Tenochtitlan en 1521, que se puso fin al linaje gobernante de Moteuhczoma Xocoyotzin, que era en realidad originario de Colhuacan. Al estilo europeo, muchas familias prehispánicas basaron su legitimidad en remotos orígenes, deidades y mitologías.
Pero en general, la ciudad-Estado de la que decían provenir los tlatoque o gobernantes de México-Tenochtitlan era Colhuacan, la cual se encontraba a unos cuantos kilómetros de distancia de su ciudad, pero que histórica y culturalmente no podía ser más distante del humilde origen del resto de los mexicas.
Alfredo López Austin en su libro Hombre-Dios. Religión y política en el mundo náhuatl, diversos gobernantes humanos a lo largo del tiempo fueron llamados Quetzalcóatl porque imitaron el modelo ejemplar de este gobernante-dios, y porque fundaron poderosos linajes que rigieron en varias espléndidas ciudades llamadas Tollan, como Cholula, Colhuacan, Chichén Itzá, Tzintzuntzan o Gumarcaaj, esta última en lo que hoy es Guatemala. Por ello, en las historias de Quetzalcóatl se mezclan la historia y el mito, lo divino y lo humano.
Origen de Colhuacan
Asimismo, respecto al origen de Colhuacan, las historias del siglo XVI cuentan que Topiltzin nació originalmente en ese lugar y partió de ahí para fundar Tollan; posteriormente, tras la caída de esta ciudad, los toltecas descendientes de ese señor regresaron a la Cuenca de México y volvieron a fundar Colhuacan.
Esto significaría que esta ciudad sería a la vez la antecesora y la sucesora de Tollan, y por ello el altépetl o ciudad-Estado más antiguo de la Cuenca de México, y que su linaje de gobernantes era el más añejo y prestigioso de todos los linajes toltecas de la región, pues habría sido fundado en 717 d.C.
La historia que se ha hecho oficialmente aceptada, la de la profecía de un águila devorando una serpiente sobre un nopal, es mucho más compleja, ya que los mexicas se establecieron en diversas poblaciones, fundaron algunas ciudades y asentamiento final incluyó la aceptación de Azcapotzalco como altépetl supremo.
Asimismo, el islote estaba crecido de tulares, carrizos y una rica diversidad acuática que les permitirá la subsistencia así como una posición militar estratégica, si bien los primeros años sus condiciones de vida serán precarias, esta cultura logró dominar una entidad geográfica de más de 7800 kilómetros cuadrados de superficie con más de 100.000 personas viviendo en ella.