Imagen de portada: Everett
Fernando de Alva Ixtlixóchitl es un historiador que provoca controversia.
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Fernando de Alva Ixtlilxochitl es uno de los cronistas mexicanos más controvertidos y provocativos del período colonial, pero poco conocido en nuestro país. También es el nombre de una pequeña calle en la colonia Tránsito de la Alcaldía Cuauhtémoc.
De Alva Ixtlilxochitl es un descendiente del famoso poeta-rey prehispánico Nezahualcoyotl y del aliado de Hernán Cortés. Hijo de Juan de Navas Pérez de Peraleda y de Ana Cortés Ixtlilxóchitl, fue descendiente directo de los reyes de Acolhuacan y de Tenochtitlan (su bisabuelo fue Hernando Ixtlilxóchitl), último tlatoani de Texcoco, también llamado Ixtlilxóchitl II, (hijo de Yacotzin ; por lo tanto tataranieto de Nezahualcoyotl), y de Beatriz Papatzin, hija ésta de Cuitláhuac, antiguo señor de Iztapalapa y último tlatoani de los mexicas en la época de la invasión española, período en que expulsó a los conquistadores en el episodio conocido como la Noche Triste, Aparte descendiente de Hernan Cortés.
Por mediado del Arzobispo de México Fray García Guerra, fue nombrada su familia, noble, y se les dio un pequeño señorío hereditario. Escribió crónicas que reescribieron la historia prehispánica y colonial. Tradicionalmente conocido como un historiador europeizado de Tetzcoco, escribió prolíficamente, produciendo documentos que cubren varios aspectos de la historia, la religión y la literatura anteriores y posteriores a la conquista.
Sus escritos del siglo XVII han tenido un efecto duradero en la comprensión de la cultura y la historia mexicanas desde el período colonial hasta el presente. Pero debido a que Alva Ixtlilxochitl utilizaba con frecuencia las tradiciones orales tetzcocan y los códices pictóricos de los logros heroicos de sus antepasados, los estudiosos han dicho durante mucho tiempo que sus escritos muestran un sesgo tetzcocano que distorsiona representaciones y entendimientos de la historia y cultura prehispánica mexicana.
Esto es visible en uno de sus libros más populares, y reconocido y estudiado más en el extranjero que en México, llamado Fernando de Alva Ixtlilxochitl y su legado: una colección de ensayos que proporciona una perspectiva más profunda sobre la vida, el trabajo y el legado de Alva Ixtlilxochitl.
Los colaboradores del libro revisan y amplían los conocimientos previos de la identidad racial y cultural de Alva Ixtlilxochitl, incluido su método de transcripción de textos pictóricos, su tratamiento del género y su influencia en el nacionalismo mexicano. Los autores de capítulos que provienen de los campos de antropología, historia, lingüística y literatura ofrecen nuevas perspectivas valiosas sobre las complejidades de la vida de Alva Ixtlilxochitl y sus contribuciones a la historia y la erudición de México.
El libro cuenta con una serie de análisis académicos bien investigados y muy bien pensados de varias disciplinas sobre el trabajo del historiador mexicano del siglo XVII Fernando de Alva Ixtlilxochitl de Texcoco. Es una contribución al creciente interés en los intelectualismos y alfabetizaciones indígenas de América Latina.
Asimismo, sus estudios en el colegio de Santa Cruz de Tlalteloco y su origen real (entre sus ascendientes figuran los grandes señores de Texcoco y el emperador Cuitláhuac) permitieron a De Alva, documentarse con las narraciones y testimonios de los ancianos de su tiempo y con las pinturas jeroglíficas, lo que da especial interés a su Historia chichimeca.
Aunque ni esta obra ni sus diversas Relaciones (algunas de ella escritas primeramente en lengua mexicana) suelen considerarse estrictamente crónicas históricas, lo que no significa que dejen de tener interés histórico las noticias que proporciona, tanto por su sencilla objetividad como por la calidad de las fuentes. La Relación de Pobladores y la Historia chichimeca se publicaron en la colección Kingsborough y fueron traducidas al francés por Ternaux-Compans.
Ixtlilxóchitl consultó con los ancianos principales muchos de los asuntos tratados en la Historia. Ésta formaba parte, probablemente, de una obra general sobre la Nueva España, que no nos ha llegado. Remontándose a la creación del mundo, relatada conforme a la tradición india, la Historia chichimeca llega hasta el descubrimiento de América y la conquista española, terminando con la narración del primer ataque de Hernán Cortés a la ciudad de México, aunque falta el relato de los demás acontecimientos del sitio.
Fernando Alva Ixtlilxóchitl también actuó como intérprete en el juzgado de indios, y a pesar de ser indígena se incorporó a la cultura española, al grado de ser llamado Fernando de Alva Ixtlilxóchitl Cortés, en memoria del conquistador de Tenochtitlan, Hernán Cortés.