Foto destacada: Library of Congress
Muchos sucesos, decisiones problemáticas y revueltas sociales hicieron que México perdiera mucho territorio.
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México era mucho más grande hace dos siglos, pero los movimientos independentistas, guerras y tratos del siglo XIX, fueron clave para la reducción geográfica del país. Los cambios del país en este siglo fueron vertiginosos y los cambios que hubo en el mundo, también afectaron al país. La complejidad geográfica de México, su integración política y culturalmente es sumamente interesante, pero por ahora, te dejamos algunas ideas clave sobre los cambios que hubo en el territorio.
Reino de Guatemala
El Reino de Guatemala seguía el dictado de un monarca español y estaba constituido por el territorio que hoy en día es Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, además del estado mexicano de Chiapas. Su capital se situó en Santiago de los Caballeros de Guatemala y, desde 1776, en Nueva Guatemala de la Asunción.
En 1821, las cinco provincias de la Capitanía General de Guatemala proclamaron su independencia de la Monarquía Española. Estas fueron anexadas de manera efímera por el Primer Imperio Mexicano y, tras la abdicación de Agustín de Iturbide, en 1823, formaron las Provincias Unidas del Centro de América, que se transformó en 1824 en la República Federal de Centroamérica.
Tratado de Guadalupe-Hidalgo
El Tratado de Guadalupe-Hidalgo, oficialmente llamado Tratado de Paz, Amistad, Límites y Arreglo Definitivo entre los Estados Unidos Mexicanos y los Estados Unidos de América; obligó al territorio mexicano a ceder más de la mitad de su territorio a EE.UU. Fue firmado por los gobiernos de México y EE.UU. el 2 de febrero de 1848 y dio fin a la guerra que ambos países libraron entre 1846 y esa fecha.
Independencia de Texas
Con la independencia mexicana, Texas quedó enmarcado en el Estado mexicano de Coahuila y Texas, uno de los 19 que componían el país durante la Primera República Federal (1823-1835). Pero Texas declaró su independencia en 1836 formando la República texana, después de que EEUU rechazara su anexión al tratarse de un estado esclavista. Pero en 1845, el presidente James K. Polk declaró la anexión de Texas a Estados Unidos, aunque México nunca reconoció esta unión rompiendo relaciones diplomáticas
En enero de 1846, el presidente James K. Polk, autorizó al general Zacarias Taylor avanzar con sus tropas hacia el río Bravo y en marzo se enfrentó con tropas del ejército mexicano. A partir de entonces, tropas de EE.UU. entraron al país por diferentes frentes, la Marina bloqueó los puertos del Golfo de México y del Pacífico, y las derrotas se sucedieron para los mexicanos.
Nuevo México y Alta California
Para retirar sus tropas, EE.UU. pidió a México que le cediera Nuevo México y Alta California y que le permitiera el libre tránsito por Tehuantepec. Pero el gobierno mexicano no aceptó las condiciones, por lo que los soldados de EE.UU. siguieron avanzando, hasta llegar a la entrada de Ciudad de México.
Arizona: excluyendo la región más tarde anexada en la Venta de La Mesilla.
Colorado al oeste del límite de la antigua República de Texas.
Nuevo México al oeste del río Grande y excluyendo la Venta de La Mesilla.
Wyoming al oeste de la frontera de la antigua República de Texas y al sur del paralelo 42.
Oklahoma y Kansas la parte que hace frontera con el Norte de la antigua República de Texas.
La tierra de la Cesión Mexicana fue una posesión no organizada de los Estados Unidos hasta que el Congreso estableció, el 9 de septiembre de 1850. La firma del Tratado de Guadalupe-Hidalgo que, además de la transferencia de territorios, estableció el río Bravo o río Grande como la línea divisoria entre Texas y México.
También se estipuló la protección de los derechos civiles y de propiedad de los mexicanos que permanecieran en el entonces ya territorio estadounidense. Asimismo, antes de ser ratificado, EE.UU. suprimió el artículo que les permitía a los mexicanos conservar las concesiones de tierras hechas por su gobierno y dejó a discreción del Congreso otorgar o no a estos la ciudadanía estadounidense.
Como consecuencia, el tratado se considera uno de los capítulos más negros de la historia de México, ya que éste perdió con él más de la mitad de su territorio.