Foto destacada: Mario Patiño artist
Lukas Avendaño es uno de los artistas multidisciplinarios más fascinantes de la última década.
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Lukas Avendaño es uno de los artistas contemporáneas con más autenticidad, empatía, amabilidad y con un talento fascinante en todas las actividades que lleva a cabo. De hecho, me da un gran placer escribir sobre él y su carrera e historia de vida.
Lukas pasó caminar horas para llegar a la escuela a viajar por el mundo hablando de justicia, diversidad y libertad de expresión a través de las artes escénicas. Creció en una comunidad indígena sin agua potable ni luz eléctrica, Tehuantepec, Oaxaca, donde vive con su madre.
Es antropólogo, poeta, performancero, el tercero de siete hijos y orgulloso muxe. Tiene un pelo negro hasta los hombros, un cuerpo que parece escultura griega y un talento que se le desborda.
Estudio Derecho en la ciudad de Oaxaca, y después en Xalapa, Veracruz, estudió Antropología y Artes Escénicas. Pero Lukas es más de lo que puede decirse de su formación o etiquetas: bailarín, coreógrafo, poeta, actor, modelo, artista de performance, antropólogo, muxe performer y artista trans multidisciplinario.
Lukas se ha presentado en todas partes, ha realizado sus obras en todo México y en países como Argentina, Colombia, Polonia, Canadá, Alemania, España, Guatemala, Suiza, Estados Unidos y Ecuador. Se ha presentado en más de una docena de teatros y festivales de artes escénicas dentro y fuera de México. Ha creado diversos proyectos en campos como la dirección, la coreografía, la interpretación y la docencia, así como una prolífica producción literaria.
Lukas se ha presentado en todas partes, ha realizado sus obras en todo México y en países como Argentina, Colombia, Polonia, Canadá, Alemania, España, Guatemala, Suiza, Estados Unidos y Ecuador. Se ha presentado en más de una docena de teatros y festivales de artes escénicas dentro y fuera de México. Ha creado diversos proyectos en campos como la dirección, la coreografía, la interpretación y la docencia, así como una prolífica producción literaria.
Aquí te dejamos uno de sus textos:
8 de diciembre de 1980 / Días de la purísima y santísima virgencita de Juquila. / Mi abuela materna Modesta que en paz descanse / porque la atropelló un camión / Hubiera preferido que me llamaran Mariano Concepción, / pero se murió conforme con que yo respondiera al nombre / de Poncho por no decir Concha o Concho,
y hoy estoy aquí. / No soy Pasolini pidiendo explicaciones. / No soy Ginsberg expulsado de Cuba /después de declarar públicamente que por las noches soñaba / que se lo cogía el doctor Ernesto Guevara de la Serna, /más conocido como el Comandante “Ché” Guevara. / Tampoco soy un marica disfrazado de poeta, no necesito disfraz, /aquí está mi cara. Hablo por mi diferencia / defiendo lo que soy y créanlo no soy tan raro, / me apesta la injusticia / y sospecho de esta chueca democracia. / Pero no me hablen del proletariado, de la vanguardia del proletariado porque ser pobre, indio, negro y maricón es peor. /
Hay que ser ácido para soportarlo; es sacarle la vuelta a los machitos de la esquina, / es un padre que te evita / porque al hijo se le dobla la patita, se le va la puerca al monte, / se le hace agua la canoa, se le voltea el calcetín, / es tener una madre de manos tajeadas por el cloro / envejecidas de limpieza / acunándote de enfermo / por malas costumbres / por malas compañías / por castigo divino / o para acabarla de chingar por mala suerte, / como la dictadura / o peor que la dictadura / porque la dictadura pasa / y viene la democracia / y detrasito el socialismo / ¿y entonces? / ¿qué harán con nosotros compañero? / ¿nos amarrarán de las trenzas en fardos / Y nos enviaran en algún tren con destino a ninguna parte / como en el barco del general Ibáñez / donde muchos pinches putos aprendieron a nadar / pero ninguno llegó a la costa / porque las casas de Valparaíso apagaron sus luces rojas.