5 maravillas ocultas para conocer en el crisol biocultural de Cuetzalan

Foto destacada: Jenifer Albino y Tesoros Mexicanos

Cuetzalan es un paraíso biocultural divino en Puebla.

 

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México tiene una gran biodiversidad y fantásticos escenarios naturales, pero pocos son los sitios como la Sierra de Puebla, y en particular Cuetzalan. Y es que tiene una ubicación geográfica privilegiada hacia el Golfo de México, lo que le da una intensa humedad casi todo el año y su territorio es producto del vulcanismo e intensas fuerzas tectónicas.

Todo en conjunto hace posible la gran variabilidad de altitudinales que favorecen  el desarrollo de los bosques de pino Ayacahuite, la selva tropical mediana de cedros y caobas, en las partes bajas, pasando por la gran diversidad biológica de los bosques mesófilos de montaña o bosques de niebla.

 

Además, en estos senderos y caminos reales es posible encontrarse con niños y niñas, mujeres y hombres vistiendo sus atuendos y hablando en la lengua nahua o maseualkopa, realizando sus labores cotidianas. El territorio Cuetzalteco tiene más de 1,000 años de historia y es una bella expresión de la fusión de diversidad cultural y naturaleza expresada en arquitectura vernácula, paisajes moldeados por la pluricultura, sus rituales, su pintoresco tianguis  siempre acompañados por lluvia y neblina que da cobijo a toda esta riqueza.

 

 

Gruta del Sol

 

 

Si visitas el bosque, puedes recorrer la Poza Pata de Perro es una formación natural que tiene la silueta de una huellita, o la Gruta del Sol; una cueva donde se avanza en un terreno a desnivel y es posible nadar en pozas subterráneas, cerca de pequeñas cascadas. Alcanza entre 800 y mil metros de profundidad, que se recorren en un par de horas mientras vas admirando las formaciones de roca a tu alrededor.

 

La Poza de las Madres

 

 

La Poza de las Madres es un escenario en donde se puede llegar a caballo o mediante una agradable caminata por la naturaleza. Es una poza con cuatro metros de profundidad máxima, formada en el río Cuichat, donde se permite echarte clavados y nadar. Se llama Poza de las Madres porque las monjas de un colegio religioso acostumbraban visitarla a menudo.

 

Gruta de los Duendes

 

 

Tiene este nombre porque quien ha entrado dice que es común escuchar risitas, pasos o murmullos que han sido atribuidos a duendes. Además, como el pueblo está rodeado de bosques que se cubren de neblina, así que este tipo de leyendas no son extrañas. También se hacen recorridos paranormales en la gruta pero es necesario estar siempre acompañado, si no quieres perderte a causa de una broma de los duendes.

 

Las Tres Caídas

 

 

Se trata de justo, un trío de saltos de agua paralelos queda muy cerca de Las Brisas, la cascada más famosa de Cuetzalan por su cercanía al pueblo. Solo tienes que caminar 500 metros para llegar a Las Tres Caídas.

Hay otro sitio que comparte este nombre. Se trata de una poza a donde casi no van turistas. Alcanza unos 30 metros de diámetro y tiene partes poco profundas para meterte de manera segura si no sabes nadar. Es alimentada por tres cascadas que descienden de manera escalonada.

 

Villa de los Vientos

 

 

Este sitio es un hotel de cabañas estilo alpino, situadas en un cerro desde donde se aprecia el pueblo y los amaneceres. Su interior es de madera y se caracteriza por su estilo sencillo, pero sofisticado; tienen espacio para grupos de cuatro o hasta seis personas. El complejo cuenta con restaurante, alberca y mirador.

 

 

Cuetzalan, Puebla

Dónde: Cuetzalan del Progreso, zona montañosa de Puebla.

Cuando: todo el año

Entrada libre