Foto destacada: Artribune
Tina Modotti fue la musa de Edward Weston, quién solía fotografiarla mientras recitaba poesía.
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El gran fotógrafo Edward Weston recibió su primera Kodak Bulls-Eye #2 en 1902 y las recomendaciones de su padre: “no tendrás que cambiar nada de la Kodak. Siempre tenga el sol detrás o al costado, nunca de manera que brille en el instrumento. No te alejes demasiado del objeto que deseas tomar, o será muy pequeño. Mira lo que te vas a tomar en el espejo. Solo puedes tomar doce fotografías, así que no desperdicies ninguna en cosas sin interés”.
Con la Kodak, los consejos de su padre, y un odio por la escuela, mucha timidez, inquietud y con mal genio; la caja negra se convirtió en un amigo ideal. Y con el paso de los años, la fotografía marcó el rumbo de su vida.
Viviendo en California, entre 1911 y 1922 ganó muchos premios con imágenes que produjo utilizando el estilo pictórico de enfoque suave de la época. Años más tarde experimentó con un estilo más abstracto y definido. En 1922 Weston se mudó a la Ciudad de México y abrió un estudio con su aprendiz y compañera, Tina Modotti –Aunque todavía estaba casado.
Tina Modotti y Edward Weston en México
En esa época, Modotti era una actriz de cine mudo a tiempo parcial que conoció a Weston en Los Ángeles en 1921. Modottu animó a Weston viajar a México juntos y pronto abrieron un estudio en la Ciudad de México. Asimismo, Modotti le presentó a Weston a los artistas mexicanos de la época: Diego Rivera, Frida Kahlo, José Clemente Orozco…
En 1923 Weston fue bastante reconocido en México, tuvo diversas exposiciones y los críticos los elogiaron. Weston se obsesionó con las fotografías que le tomó a Modotti, pero Modotti era una artista muy independiente, no estaría a la sombre de Weston.
Cerca del final de su relación, ella le escribió: “Siempre estoy luchando para moldear mi vida de acuerdo con mi temperamento y mis necesidades; en otras palabras, pongo demasiado arte en mi vida – demasiada energía – y en consecuencia no me queda mucho para dar al arte.
Modotti aparece en muchas imágenes del fotógrafo, en muchas recitando poesía. Weston enfatizaba la expresividad de su boca, ligeramente abierta, y de sus cejas levantadas. En México, su obra conoció una etapa floreciente, ampliándose su temática.
En México realizó un estudio arquitectónico de los tejados de Ciudad de México desde una azotea, allanando el espacio hasta convertirlo en un dibujo bidimensional de luz y textura. Pero fue hasta 1929, cuando comenzó sus composiciones abstractas sobre berenjenas, coles, pimientos… y casi cualquier cosa que pudiera emplear primero para el arte y luego para el almuerzo.
Modotti estaba más comprometida con la política en México y usaba su cámara bajo esa luz. Finalmente, sus creencias radicales la llevaron a pasar un tiempo en prisión. Se vio obligada a abandonar México y solo regresó para morir allí en 1942. Mientras estuvo en México, la visión y las teorías fotográficas de Weston se intensificaron y perfeccionaron. Creía en la previsualización de la imagen fotográfica final.
La visión de Weston y las teorías fotográficas se intensificaron y perfeccionaron. En 1926 viaja con Modotti y su hijo Brett. En 1927, Weston regresó nuevamente a Glendale y comenzó sus ahora célebres estudios de primeros planos, desnudos y paisajes de forma natural. En 1932, Weston se convirtió en uno de los miembros fundadores del grupo f/64; trabajó en series fotográficas de desnudos, paisajes, nubes y arquitectura. Fue el primero en recibir la Beca Guggenheim de Fotografía en 1937.
Aquí te dejamos algunas de las fotografías del gran Edward Weston.