Foto destacada: @crgs_udem
Fotografías de © Universidad de Monterrey (UDEM)
Tadao Ando es uno de los arquitectos más reconocidos del mundo y puedes ver las Puertas de la creación en México.
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Tadao Ando es un arquitecto japonés nacido en 1941 en el barrio de Osaka, que en su infancia estudió para ser boxeador y luchador, pero en un viaje escolar a Tokio, conoció el Hotel Imperial de Frank Lloyd Wright, y quedó impresionado por el poder de la arquitectura. Así que dejó el boxeo para dedicarse a la arquitectura para nuestra fortuna.
“La arquitectura es un ser. Y es importante dónde va a vivir esa arquitectura”. Con esta reflexión de marcado carácter filosófico conocemos el universo de Tadao Ando, uno de los más renombrados arquitectos de nuestro presente, cuyos edificios han dejado una indiscutible huella en la historia de la arquitectura contemporánea con obras que establecen un diálogo entre sus propias ideas y los requerimientos del entorno natural, las costumbres y los programas de necesidades de nuestras sociedades modernas. Su divisa parece clara: la armonía entre naturaleza y arquitectura es innegociable, una suerte de imperativo espiritual.
Fotografía de Roberto Alani
La arquitectura de Tadao Ando se encuentra por todo el mundo, su intención es que las personas experimenten el espíritu y la belleza de la naturaleza a través de la arquitectura. En 1995, ganó el Premio Pritzker de arquitectura, y donó los 100.000 dólares del premio para los huérfanos del terremoto de Kobe de 1995.
Aquí te dejamos algunas de la gran obra que el arquitecto ha creado en México.
“Puerta de Creación” Centro Roberto Garza Sada de Arte Arquitectura y Diseño
Universidad de Monterrey (UDEM)
El Centro Roberto Garza Sada es una escuela de Arte, Arquitectura y Diseño de la Universidad de Monterrey (UDEM). Es la primera construcción comercial del arquitecto japonés diseñada para América Latina y cuenta con la certificación Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental.
“La Puerta de la Creación”, destaca por su imagen contundente de hormigón visto. La obra ha tenido un coste de más de 45 millones de dólares, y se ha llevado a cabo gracias a las aportaciones de empresarios y donantes, construyéndose a lo largo de 34 meses y empleando a más de 2,800 trabajadores.
En su planta tiene 99 metros de largo por 27 de ancho, cuenta con seis niveles de doble altura de 5.40 metros cada uno, que superan grandes retos estructurales, como los 100 metros de largo con claros sin soporte en la parte inferior.
Para la edificación se llevó a cabo un largo proceso de diseño y gestión, tres veces se suspendió el proyecto, pero al final la gran voluntad de los regiomontanos se impuso.
Casa Monterrey
Monterrey, Nuevo León
Fotografías de Revista Axxis
Casa Monterrey es una de las obras más famosas de Tadao Ando en Latinoamérica, al ser el primer proyecto residencial de este arquitecto en México.
Ubicada en una ladera del Parque Nacional Cumbres de Monterrey, esta casa alberga una biblioteca a doble altura, la cual es el punto focal del proyecto, ya que corta por la diagonal a un patio cuadrado, teniendo como referencia la estructura de una hacienda mexicana tradicional.
Casa Monterrey tiene estructuras similares al Templo del Agua en Japón, que se ordenan en los niveles inferiores alrededor de los dos patios interiores triangulares. Con esta obra, Tadao Ando rindió homenaje a Luis Barragán, arquitecto mexicano al que dice admirar.
Casa Wabi
Oaxaca, Puerto Escondido
Un proyecto diseñado para impulsar la colaboración y el compromiso social a través de las artes. El objetivo de la Fundación Casa Wabi es ambicioso, pero día tras día, todas las personas que contribuyen a los proyectos desarrollados prueban que está a su alcance.
Nacida en 2014 por iniciativa del artista mexicano Bosco Sodi, la fundación tiene su sede principal en la costa oaxaqueña, lo que permite acercar a los artistas residentes con las comunidades de la zona. Diseñado por el famoso arquitecto japonés Tadao Ando (ganador del premio Pritzker en 1995) , consta de seis estudios/dormitorios, varios espacios de usos múltiples, una sala de proyección y un jardín de más de 27 hectáreas.
El nombre de la fundación se basa en el concepto japonés “wabi-sa-bi”, que significa el arte de buscar la belleza en la imperfección y en la profundidad de la naturaleza, y está basado en una visión del mundo centrada en la aceptación de lo efímero.