Foto destacada: hotelhaciendadecortes.com.mx
Esta hacienda fue una de las tantas que Hernán Cortés tuvo, pero en la Ciudad de Morelos.
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Pero seguro, no conocías estos datos ocultos de esta increíble lugar.
Fue una Hacienda cañera
Su construcción comenzó en la época colonial y fue una hacienda cañera del siglo XVI, fundada justo, por el conquistador Hernán Cortés en 1530. Hoy en día es una de las construcciones más emblemáticas del estado de Morelos, y se llamó la Hacienda de San Antonio Atlacomulco.
Pieza de arte y arquitectura
Esta construcción data del siglo XVI cuando la Corona Española le cedió a Hernán Cortés este lugar tras haber sido nombrado Primer Marqués del Valle de Oaxaca en 1530.
Sus muros de piedra, jardines y cuerpos de agua esconden leyendas y relatos históricos de una de las joyas arquitectónicas más emblemáticas de la época.
Acueducto con agua de Chapultepec
Con la finalidad de que aguas frescas llegaran hasta el ingenio azucarero, y se pudieran sembrar grandes cantidades de caña de azúcar en las instalaciones de la Hacienda, Cortés mandó construir un acueducto de 1680 metros que provenía de los abundantes manantiales del Chapultepec.
Esto hico posible que se creara el segundo ingenio azucarero más importante de la Nueva España en 1531.
Mano de obra para la cosecha de azúcar
Alrededor del ingenio azucarero, se establecieron comunidades indígenas que realizaban las tareas de cultivo y cosecha de azúcar. Pero tenían poca resistencia física, así que fueron reemplazados por africanos provenientes de las Antillas.
Se trajeron 60 africanos y 120 indígenas daban vida a una de las haciendas.
Según una leyenda
Tras el fallecimiento de Hernán Cortés, el lugar pasó a manos de su esposa Juana de Aragón Pignatelli, y luego fue administrado por diversas personas y se dice que algunos años vivió ahí la última heredera de Hernán Cortés, María Gloria Pignatelli Monteleone Cortés.
Piezas de Manuel Tolsá
El corredor principal de la hacienda tiene un busto de Hernán Cortés creado por el arquitecto Manuel Tolsá, artista que también realizó la famosa estatua del Caballito dedicado a Carlos IV y el majestuoso Palacio de Minería. Solamente existen dos copias de este busto, uno, colocado en el jardín del Hospital de Jesús y otra en la Hacienda de Cortés.
Hacienda de Cortés, Cuernavaca
Dónde: Plaza Kennedy 90, Atlacomulco, Jiutepec, Mor
Cuando: todo el año
Cuánto: habitaciones desde $3000
