Foto destacada: Anthony JP / Atlas Obscura
Las Catacumbas de los Tres Reyes te provocarán mucha curiosidad y asombro.
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Tizimín en maya significa “lugar del tapir” y formaba parte de un provincia maya de los Cupules. Esta ciudad ha sido habitada desde hace más de 4200 años, según los vestigios encontrados y constatados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
A esta ciudad había peregrinaciones anuales por parte de la población maya, para rendir culto a las tres deidades principales que simbolizaban la vida y los elementos fundamentales para su reproducción cultural como pueblo, estas deidades eran Yum Chac (dios de la lluvia), Yum Kaxx (dios del campo) y Yum Ik (dios del aire).
A estas deidades se les tributaba en un montículo donde posteriormente se erigió el templo parroquial y los frailes católicos sustituyeron las deidades mayas por los tres reyes magos de la tradición cristiana, explicando a los indígenas mayas que, tras haber sufrido una transmutación, se trataban de las mismas deidades con nombres y hasta un color de piel diferente.
En este sitio se encuentran las catacumbas de Tizimín también conocidas como Catacumba Tres Reyes. Esta atracción turística fuera de lo común se encuentra en el patio trasero de una casa familiar. Durante tres generaciones los hombres de la familia han ido labrando este espacio.
Las Catacumbas de Tizimín se han convertido en uno de los atractivos que más llaman la atención en esta ciudad al Oriente de Yucatán. Su peculiar belleza y el misterio para muchos sobre su origen lo hacen un punto de reunión para turistas locales y extranjeros.
En estas catacumbas no hay entierros como las hay en su idea popular, más bien se trata de una construcción que sí tuvo el objetivo de venerar a los muertos como un mausoleo sagrado; pero los anfitriones nunca depositaron a sus ancestros en este sitio.
Se cuenta que cuando se comenzó a construir como canal de seguridad subterráneo 100 años atrás con el fin de proteger a su familia y amigos de la guerra durante tiempos tumultuosos.
¿Cuál es la historia de estas peculiares catacumbas?
Años más tarde, la familia continuó con la construcción y expansión de los pisos subterráneos, y así lo continuaron haciendo las generaciones de la familia hasta llegar a la actualidad.
Han sido tan populares que en realidad han puesto a Tizimín como un destino turístico. Las catacumbas no son aptas para los claustrofóbicos o personas que se sienten incómodos en espacios cerrados, tienen unos 20 metros de profundidad, será un aproximado a la altura de un edificio de cinco pisos si se le da la vuelta.
Es considerada como uno de los rincones de Tizimín y sin duda son una de las atracciones turísticas más extrañas del sur mexicano. Hay tres sitios de catacumbas en Tizimín. Dos de ellos están abiertos al público, el tercero es un bar y no está abierto a los visitantes.
Estas catacumbas son galerías subterráneas peculiares y tienen algo de místico. Es el punto de reunión para turistas. Las catacumbas tienen casi un siglo y son la herencia de una familia que trabajó horas limpiando, esculpiendo estatuas y adaptando el lugar para que fuera seguro, en primera instancia para su familia.
Este atractivo es público para que la gente pueda admirar el trabajo de años por parte del padre de Gaspar Rosado. Hoy en día Luisa Dzul Escamilla es la encargada de cuidar las catacumbas que se crearon con herramientas rústicas y sin ayuda de nadie.
Catacumbas La Escondida (Tres Reyes)
Dónde: Tizimin, Yucatán, Calle 59 entre 52 y 54. rumbo al agua potable
Cuando: lunes a domingo de 9:00 a 19:00.
Cuánto: $25