Foto destacada: Info Quintana Roo
La zona arqueológica de Oxkintok es poco visitada y de gran importancia para comprender la cosmovisión de los mayas.
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Una leyenda de Oxkintok asegura que los gobernantes de este lugar, antes de recibir su distinción, debían adentrarse a las zonas oscuras para descender al mundo el inframundo. Una vez ahí, los jerarcas podían entrar en contacto con los dioses y al siguiente día saldrían (a la misma hora del sol) renovados para ratificarse como líderes.
Pero hoy en día, la Zona Arqueológica Oxkintok es bastante atractiva para los turistas de Yucatán, ya que hay diversas estructuras y pirámides con estilos arquitectónicos Pucc y es posible escalarlas para obtener las mejores vistas del entorno.
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Oxkintok tiene diversos conjuntos arquitectónicos, llamados Ah Dzib, Ah May y Ah Canul, las sedes de poder y resistencia de los linajes más importantes de Oxkintok. El grupo Ah Dzib es de una planta casi cuadrangular con cuatro plazas. Hay un Juego de Pelota y un “baño de vapor”.
El Ah May es un conjunto sobre una plataforma con escalinata; se levanta una construcción piramidal escalonada, estructuras abovedadas, plataformas residenciales y altares, que se distribuyen en cuatro plazas. El Ah Canul comunica con los otros templos centrales de Oxkintok mediante tres.
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El laberinto maya o Satunsat
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El Satunsat es una zona rectangular distribuida como un laberinto. Una de las rarezas en el mundo maya y este es uno de los tres hasta ahora conocidos; los otros dos se encuentran en Yaxchilán y en Toniná, Chiapas.
El laberinto maya, también conocido como tza tun tzat, y significa perdedero o lugar donde es fácil extraviarse. Es un edificio de 10 metros por 20 y una elevación de 7 metros. Una pequeña puerta del edificio nos guía a oscuro interior, donde es fácil perder la temporalidad gracias a la luz que entra por ellas.
Este edificio era usado para ritos iniciáticos, pruebas que debían superar los varones elegidos que aspiraban a ser sacerdotes, curanderos u otra profesión a la que sólo unos pocos tenían acceso, así se cierran y mantienen los círculos de los poderosos. El laberinto de tres niveles tiene una fuerte relación con los tres niveles cósmicos del mundo maya: celeste, terrenal y subterráneo.
En el interior se descubre una serie de pasadizos abovedados, escalones y 17 cámaras de los dos primeros niveles. Los muros se abren como tragaluces, ventiladores o, quizá para la observación astronómica. Se trata de un edificio que evoca la cosmovisión maya: el complejo cueva-pirámide, en parte a un nivel y en parte subterráneo, atribuido al Universo y sus tres espacios: el Inframundo, la Tierra y el Cielo.
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Zona Arqueológica de Oxkintok
Dónde: a 70 km. al sur de Mérida, Maxcanú, Yucatán
Cuando: lunes a domingo de 08:00 a 17:00 horas, todos los días del año.
Cuánto: $65
