Foto destacada: Viridiana
En todas las listas del “mejor cine del mundo” encontrarás una película de Luis Buñuel, como mínimo.
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Siempre es un gran placer escribir sobre uno de los cineastas españoles más reconocidos a nivel mundial, uno de los cineastas surrealistas más alucinantes de la historia del siglo XX; en cuyas fantasías acecha el inconsciente freudiano, y un marxismo nada ortodoxo. Además, porque todas las listas de “el mejor cine del siglo XX” siempre tendrán una película de Buñuel.
Luis Buñuel Portolés nació el 22 de febrero del año 1900 en la población de Calanda, Teruel (España).
Era el mayor de siete hermanos, hijo de un ferretero llamado Leopoldo Buñuel y de María Portolés, mujer que solamente tenía diecisiete años cuando contrajo matrimonio con Leopoldo, casi treinta años mayor que ella.
Después de estudiar con los jesuitas, recibiendo una educación religiosa que le marcó en su devenir personal y artistico, Buñuel se trasladó a Madrid en el año 1917 para iniciar la carrera de Ingeniería Agrónomo, instalándose en la Residencia de Estudiantes en donde entabló amistad con Salvador Dalí y Federico García Lorca.
En la capital de España, Buñuel abandonó Ingeniería para terminar licenciándose en Filosofía y Letras.
Con el incipiente mundo del celuloide en auge fue la visión de la película “Las Tres Luces” (1921), obra de su gran ídolo cinematográfico, el director alemán Fritz Lang, el detonante para que Luis Buñuel comenzara a dedicarse al séptimo arte.
En el año 1925 Buñuel contrajo matrimonio con Jeanne Rucar, con quien tuvo dos hijos: Juan Luis y Rafael.
Tras ocuparse como asistente de dirección y guionista de Jean Epstein y Mario Nalpas, y estudiar técnica cinematográfica en la Academia de Cine de París, Buñuel realizó junto a Dalí el famoso corto experimental “Un Perro Andaluz” (1928), título que se convirtió inmediatamente en pieza clave en la historia del cine por su inmersión en el estilo surrealista.
El surrealismo en los años 20 desarrolló una creatividad intelectual plena de imaginería visual que destrozaba los tradicionales conceptos de expresión y narrativa, concediendo una importancia esencial a los mundos oníricos como reflejo de una lógica que dormita bajo la capacidad subsconciente del individuo.
La obra clave y comienzo del cine surrealista fue la citada “Un Perro Andaluz”, en donde salvajemente se rechazan los valores fílmicos prevalentes y se acometía una nueva forma de narrar dentro de la capacidad coherente de la imaginería surrealista, de extraordinaria fuerza visual que sirvió para provocar ansiedad en el espectador, una autocapacidad creativa propia y para subvertir la realidad cotidiana.
Los Olvidados
El primer largometraje de Buñuel y el segundo avance internacional y lanzada como “Los jóvenes y los condenados” en EU, habla justo de lo sombrío y trágico de los niños marginados e indigentes de los barrios marginales de la Ciudad México de los años 50. Una poderosa historia social-realista de delincuentes juveniles sin muchas cualidades redentoras fuera de su amor mutuo. “Los Olvidados ” fue tan vapuleada en México que se vio como un insulto a su país, tanto que se filmó un final “feliz”; con esta cinta, ganó el premio al Mejor Director en Cannes.
Viridiana
Viridiana convirtió en persona non grata a Buñuel –de nuevo. Con esta cinta escandalizó a la Iglesia y fue denunciado por el Vaticano; la imagen fue censurada por el gobierno español por “blasfema y obscena” debido a su naturaleza sexual atrevida y un homenaje a la ” Última Cena ” que representa a mendigos ingratos cenando en la misma pose que la famosa pintura de Da Vinci.
Viridiana es una joven Silvia Pinal perturbada que se dedica a alimentar y educar a un grupo necesitado de vagabundos y mendigos que se vuelven degenerados y ladrones. Para muchos es su obra maestra; ganó la Palma de Oro en el Festival de Cine de Cannes de 1961, la única película de su carrera que ganó el prestigioso premio.
El ángel exterminador
Esta película de terror-satírico-surrealista pone a prueba a la burguesía. Una cena que se vuelve alucinante en cada momento, alegremente malévola, donde los actores se convierten en salvajes entre ovejas, brujería, un oso y una mano sin cuerpo y otros alucines. El humor negro es una herramienta esencial en el arsenal de Buñuel, pero quizás nunca sea tan deliciosamente diabólico como lo es en esta ingeniosa y mordaz censura de los ricos y privilegiados.
El diario de una camarera
Se trata del “Cine francés” de Luis Buñuel, con una narrativa convencional más que por su característico surrealismo. Es una adaptación de la novela de Octave Mirbeau pero la ponemos porque marcó el primer proyecto con el guionista Jean-Claude Carriere con quien Buñuel trabajaría el resto de su carrera. De esta cinta, Buñuel dijo: “La perversión sexual me repugna, pero puedo sentirme atraído intelectualmente”. Aquí habla sobre el fascismo francés, la política extremista, la moral de la burguesía, la República con muchos toques satíricos absurdos.
Simón del desierto
Se dice que es la parte final de la trilogía sobre religión precedida por Viridiana y El ángel exterminador con cerca de 45 minutos con Silvia Pinal y un santo tonto. Es una obra ascética que marca un cambio entre sus películas mexicanas y obras maestras posteriores pero es una imprescindible para los completistas.
Bella de día
La favorita de muchos por su forma atípica y un gran éxito comercial. Ganó el León de Oro y obtuvo una nominación al BAFTA para Catherine Deneuve. Con poco material explícito sigue siendo una de las películas más eróticas jamás realizadas, donde la represión, los deseos secretos y los fetiches se filtran en cada fotograma. Aquí, los matices surrealistas se combinan con el realismo psicológico de una manera que es bastante inolvidable; es una comedia de irónica e ingeniosa y también una historia de amor llena de patetismo.
La Vía Láctea
Una de las cintas más anárquicas, provocativas y divisivas. La película es lúdica y absurda y a veces parece un antecedente de Monty Python. No es una de las películas más vistas de Buñuel, pero justo por eso “La Vía Láctea” es digna de admirar.
El discreto encanto de la burguesía
Otra de las obras de arte más conocidas de Buñuel, gracias a que ganó un Oscar a la Mejor Película Extranjera. En la cinta seis amigos burgueses (incluido Jean-Pierre Cassel, el padre de Vincent Cassel) que continuamente intentan sentarse a comer juntos pero por diversas situaciones no se puede. La película es bastante cómica y satírica y parece un poco pasada en nuestros días, es una pieza importante e influyente dentro de su filmografía.
Ese oscuro objeto del deseo
Esta cinta es una mirada malvada, diabólica y surrealista a la voracidad del anhelo, la lujuria y la pasión y posiblemente una de sus mejores películas. Además, la narración en flashback y ambientado en el contexto de una insurgencia terrorista en España, la hace una cinta fascinante. Es la película número 30 de Buñuel, le valió dos nominaciones al Oscar culminando una carrera fabulosa y provocativa.
Nazarín
Basada en la novela homónima de Benito Pérez Galdós, la película trata acerca de un sacerdote humilde que desea hacer el bien, practicar la caridad y vivir el evangelio seguido por dos prostitutas. Nazarín es un sacerdote que deja su orden y decide ir en peregrinación, pero el resultado no cumple su expectativa… Completada con el desdén del cineasta por la religión organizada, esta última imagen ganó el “Premio Internacional” en el Festival de Cine de Cannes en 1959.
