Portada de Jezael Melgoza
Viajar nunca pasará de moda porque no solo es una oportunidad de salir de la rutina y encontrar fuentes de entretenimiento alternativo, sino porque permite conocer nuevas culturas, hacer nuevos amigos, vuelve al viajero más tolerante con las diferencias y, en general, ayuda a conocer más sobre el mundo. Y si de destinos se trata, Ciudad de México ofrece una experiencia sensorial que resulta atractiva tanto para propios como extranjeros debido a la variedad de su gastronomía, su oferta cultural y artística, así como las diversas fuentes de entretenimiento diurno y nocturno.
Ciudad de México concluyó 2021 con el registro de la visita de 6.8 millones de turistas, lo que también representó una ocupación hotelera del 33.49% y la entrada de 63,545.95 millones de pesos, de acuerdo con la Secretaría de Turismo y El Economista. Pese a que el turismo a la ciudad aún se encuentra en recuperación, los datos lo confirman: CDMX continúa siendo uno de los sitios preferidos por los viajeros del mundo.
Sin embargo, la experiencia puede resultar tan intensa que por momentos resulta conveniente detenerse un poco y relajarse, a fin de retomar energía y aprovechar todo lo que CDMX tiene por ofrecer. Por eso, a continuación, se enlistan cinco actividades relajantes que se pueden hacer durante un viaje a esta fascinante ciudad.
Curiosear en internet
Es normal que cuando se está de viaje casi no se preste atención al celular, y esto es sano, sin embargo, llega un momento en el que es necesario desacelerar un poco y bajar el ritmo. Estos momentos son una buena oportunidad para buscar en internet información relacionada con nuestra próxima parada en CDMX, con algún punto histórico de la ciudad o monumento que dé curiosidad, o bien para revisar redes sociales, para jugar y buscar en Oddschecker casinos online con buen ranking, o simplemente para leer alguna reseña de un bar o restaurante de interés.
En muchos restaurantes, establecimientos comerciales e incluso en puntos interesantes de la ciudad, los viajeros y ciudadanos pueden hacer uso de códigos QR que se escanean en el móvil para obtener todo tipo de información, desde cartas de menús, hasta un poco de historia o datos relevantes sobre los museos y monumentos.
Visitar la biblioteca José Vasconcelos
Un sitio de conocimiento, con una arquitectura impresionante y conocida como la mayor biblioteca de América Latina. Inaugurada en 1946, visitar la biblioteca José Vasconcelos no solo resultará relajante, sino enriquecedor, entretenido y sus más de 600 mil libros seguro que cumplen las expectativas del lector más exigente. Se pueden visitar universos increíbles desde la comodidad de una silla.
Paseo en trajinera
Xochimilco es un punto obligado de visita en Ciudad de México, y hay muchas razones: desde el paseo en trajinera por los canales que una vez sirvieron como vías de transporte a los aztecas, hasta la cultura al encuentro que se convierte en una experiencia gastronómica y cultural. Los visitantes pueden disfrutar de bebidas, comida y mariachi, acompañados de un ambiente siempre ameno y jovial característico de la región que, aun así, resulta relajante para quien busca pasear un rato sin esfuerzo.
Picnic en el Bosque de Chapultepec
El bosque es el pulmón de la ciudad, es un sitio donde es posible pasear a pie o en bicicleta, realizar actividades deportivas o simplemente sentarse bajo un árbol y hacer un picnic. Dentro del bosque existen nueve museos, opciones gastronómicas y culturales con distintos tipos de eventos. Estar en contacto con la naturaleza siempre resulta relajante, y este caso no es la excepción.
Acudir a un temazcal
Aunque en la mayoría de los casos es necesario salir de la ciudad para llegar a uno, los temazcales siguen siendo una de las opciones favoritas para quienes buscan purificarse y renovar energías. El término temazcal viene del náhuatl ‘temazcalli’, que significa “casa donde se suda”. Consiste en un baño de vapor herbal con propiedades tanto relajantes como limpiadoras, y está inspirado en un ritual ancestral de la época prehispánica.
Ya sea sentarse en el bosque a revisar redes sociales o leer un libro en la biblioteca Vasconcelos, la relajación con estas actividades está garantizada.