Fotografía de portada: Vicente Alcazar y Tanya Badillo
Chalcatzingo, cuyo nombre significa “El lugar más preciado de los chalcas”.
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Chalcatzingo es una zona arqueológica ubicada al oriente del estado, en el municipio de Jantetelco. En el año 1000 a. C. fue el único sitio arqueológico conocido hasta el momento del Altiplano Central mexicano en el cual se elaboró arquitectura mayor como construcciones de carácter civil y excelentes bajorrelieves, las cuales representan las primeras manifestaciones artísticas en su género dentro del área mesoamericana, así como también esculturas talladas en piedra.
Además, estudios recientes han revelado que dichas particularidades son evidentes por la presencia de personas ajenas al área y grupos olmecas provenientes de la costa del golfo de México. Por lo tanto, todos estos elementos le dan al lugar connotaciones especiales.
La zona arqueológica fue dada a conocer en 1934 después de una tromba que dejó al descubierto el relieve conocido como El Rey. Luego, estudios posteriores realizados al sitio arqueológico revelaron que la Zona Arqueológica de Chalcatzingo existía desde tres mil años a. C. hasta nuestros días.
Este centro fue construido en una fértil planicie al pie de dos prominencias orográficas: el Cerro de Chalcatzingo y el Cerro Delgado. El primero de ellos tiene evidencia de haber sido un espacio ritual de primera importancia para los antiguos habitantes de la región.
Localizado en la parte meridional de las tierras altas del centro de México, se calcula que el asentamiento fue fundado alrededor del siglo XV a. C., aunque su época de esplendor se presentó hasta el siglo VII a.C., durante el período Preclásico Medio y Tardío de la cronología mesoamericana. En esta época, Chalcatzingo ocupaba una importante posición como nodo de las rutas comerciales que conectaban a Guerrero, el valle de México y las tierras bajas en el Golfo de México.
El florecimiento de Chalcatzingo ocurrió en el momento en que La Venta (Tabasco) también experimentaba su época de mayor apogeo, y es seguro que haya habido relación entre ambas poblaciones por los testimonios artísticos de estilo olmeca que se han localizado en la zona.
La zona arqueológica está integrada por una plaza central, denominada Terraza 1, en la que se localizaban las residencias de los miembros de la élite. La Terraza 25 cuenta con un patio similar al de Teopantecuanitlán, zona ubicada en el estado de Guerrero. En el centro del patio hay un altar con reminiscencias de algunos encontrados en La Venta.
La Estructura 4 es la mayor de las construcciones de Chalcatzingo. Se trata de una construcción de planta casi cuadrada, de aproximadamente 70 metros por lado. En las inmediaciones de este edificio se han descubierto enterramientos de personajes de altos estatus, los cuales portaban ornamentos de jade y espejos de magnetita. La mayor parte de los enterramientos se han localizado bajo los pisos de las casas, todos ellos con elementos que han permitido conocer la diversidad y las jerarquías en la sociedad preclásica de Chalcatzingo.
Esta zona cobró notoriedad por la gran cantidad de petroglifos y relieves que se han encontrado en la región, los que constituyen una importante cantidad de testimonios sobre las creencias religiosas de los pueblos mesoamericanos del Preclásico Medio.
Fotografía de Vicente Alázar
Varios petroglifos se han localizado en las inmediaciones de los cerro
s, lo que muestra el papel simbólico que éstos tuvieron como objeto de culto de los antiguos habitantes de este emplazamiento.
A partir del año 1000 hasta el 100 a.C., Chalcatzingo fue un importantísimo centro político y religioso. De esa época data una serie de relieves hechos en las paredes de roca y en algunas de sus construcciones. Los más famosos son El Rey, Los Jaguares y las estelas de El Cazador y de La Reina.
Por otro lado, en el Museo de Chalcatzingo se encuentran más de 240 piezas obtenidas de la zona, en su mayoría cerámica como vasijas, cucharas, braceros, figuras femeninas y hasta un esqueleto.
Fotografía: Arqueología Mexicana
Fotografía: Enrique Rivera
¿Cómo llegar?
Seguir ya sea la autopista México – Cuautla o la Federal Cuernavaca – Cuautla vía Cañón de Lobos. Tomar el entronque hacia Izúcar de Matamoros y en el crucero de Amayuca desviarse a la derecha. A 4 km. se encuentra la desviación (por la izquierda) que lleva al pueblo de Chalcatzingo. Posteriormente, seguir las señalizaciones que conducen a la zona arqueológica.
En autobús: desde la Ciudad de México, en Taxqueña, la central de autobuses del sur, se toma un autobús con destino a la ciudad de Cuautla, Morelos. En Cuautla se puede tomar un microbús con destino a Jonacatepec, donde se aborda una combi hacia Chalcatzingo.
Horario: Lunes y Martes de 10:00 a 17:00 Hrs. Miércoles a Domingo de 9:00 a 18:00 Hrs.