Fotos: Frontón México
El Moro es una de las construcciones más emblemáticas del Art Decó en México.
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“El Moro” es un edificio que ha sido sede de la lotería nacional desde 1946. Una construcción con estilo Art Decó, muy representativo de la época de la post revolución, diseñado en su totalidad por el Ingeniero José Antonio Cuevas que se encontraba en manos de una institución de Beneficencia Pública.
Este lugar fue la Comandancia De Policía donde la mañana del 23 de noviembre de 1927 los soldados escoltaron al padre Miguel Agustín Pro (hoy beato) hasta el interior del patio de la prisión. Al ver a los circunstantes y al pelotón de fusilamiento, pidió unos momentos para orar, y, al ofrecérselo, rehusó que le vendaran los ojos.
Según la historia, el padre tenía un rosario en sus manos se mantuvo de pie frente al paredón y extendió sus brazos en forma de cruz. Cuando se dio la orden de fuego, gritó en alta voz, “¡Viva Cristo Rey!”. A su hermano Humberto lo ejecutaron esa misma mañana, pero Roberto se libró en el último momento. Esa mañana fue fusilado también Luis Segura Vilchis.
Este lugar de la Ciudad de México, será rehabilitado, reforzado y preservado con un presupuesto de 47 millones 953 mil pesos, después de que sufrió daños en los sismos del 19 de septiembre de 2017 y de 2022.
El edificio será intervenido en sus 336.87 m2 de la superficie, como son los elementos estructurales (columnas, trabes y nodos). También rehabilitarán 14 mil 162 m2 de superficie construida de acabados, respetando el estilo arquitectónico art decó, incluyendo muros, columnas, plafones en interiores, fachadas, escalera y rodapié en exteriores.
El plan es extender su vida útil para los próximos 15 años, dada la importancia histórica y cultural del mismo: siendo considerado como el primer rascacielos de la ciudad y al inicio albergó en su cúpula la antena de la Empresa de Televisión de México (Canal 4).
Asimismo, fue el primero en Latinoamérica que usó un letrero de gas neón y el primer lugar donde se transmitió una señal de televisión en 1950. En 1978 la sede de la Lotería Nacional tuvo una segunda intervención, con la que perdió detalles de su fachada original.
En una tercera intervención, llevada a cabo en la década de los 90, el rascacielos se adaptó a los modernos edificios de la Avenida Paseo de la Reforma. El cambio provocó que la elegancia y sofisticación, características de su diseño, fueran sustituidas por un exterior de cristal espejo. Esto produjo un gran contraste con el concepto arquitectónico de su interior.
Finalmente, fue sometido a una cuarta remodelación donde recuperó su estilo histórico. Esta fue realizada en el marco del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana.
Los trabajos de restauración que se realizaron en la fachada, han descubierto el uso de Stream Line, uno de los grandes aciertos del art decó, que predominó en el proyecto original.