Tramo 2 del Tren Maya dará acceso a zonas arqueológicas poco conocidas de Campeche

Fotos: Tren Maya

Más de 4,333 bienes inmuebles y 281 entierros prehispánicos han sido hallados en la construcción del Tramo 2 del Tren Maya.

 

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El Tramo 2 del Tren Maya correrá en su totalidad por el estado de Campeche, de Escárcega a Calkiní, con el fin de aumentar el potencial de las zonas arqueológicas que hay en los 234 kilómetros que abarca dicho ramal de la obra ferroviaria. A pesar de todos los inconvenientes, malestar y dudas, sin duda es un gran proyecto que compagina la modernidad con la conservación del patrimonio cultural y natural de la región.

Asimismo, en este trazo han concluido la prospección arqueológica y las excavaciones en el derecho de vía, por lo que ahora comienza la fase de gabinete, la cual comprende la organización, clasificación y análisis del conjunto de materiales descubiertos, cuyas tareas se realizarán en el Baluarte de San Pedro, en la ciudad de Campeche.

 

 

Hasta ahora (enero de 2023) se han registrado y conservado 4,333 bienes inmuebles (cimientos, albarradas y basamentos, entre otras estructuras) en ocho sitios que tienen un valor excepcional para la comprensión de la civilización maya antigua. Asimismo, se han recuperado 171 bienes muebles, en su mayoría materiales cerámicos y líticos (metates), y se han analizado 237,266 tiestos. Además, se han registrado 281 entierros de época prehispánica y se tienen contabilizados 52 rasgos naturales asociados a manifestaciones culturales.

Casi todos estos hallazgos corresponden al periodo Clásico Tardío (600-800 d.C.) y destacan esculturas encontradas en las zonas arqueológicas de Edzná, Cansacbé y Pocboc. En el primer caso, en el Edificio Nohochná se halló una escultura mutilada que representa a una anciana; en el segundo, un elemento arquitectónico con glífica tallada, y en el tercero, un rostro esculpido.

 

 

 

En Edzná, donde se realizan obras en el marco del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), se hizo el diagnóstico total de una decena de grandes estructuras, entre ellas, los templos del Sur y de los Mascarones, o el Edificio Nohochná –donde concluyó la excavación del sector sur–, y una serie de complejos arquitectónicos, como la Plaza Poniente, el Juego de Pelota y la Gran Acrópolis. También, finalizaron las labores de restauración y conservación en el Edificio de los Cinco Pisos.

En esta zona arqueológica, al cual dará nombre a una de las seis estaciones del Tramo 2 del Tren Maya (que recorrerá 31 localidades de seis municipios de Campeche), se ha avanzado en la demolición de la vieja taquilla y una bodega para comenzar, en breve, la construcción del Centro de Atención a Visitantes (Catvi), una nueva unidad de servicio, adecuada al aumento de afluencia de visitantes.

 

 

Asimismo, se permitirá conocer una zona arqueológica poco difundida: Xcalumkín, próxima a la estación Calkiní, en los límites con Yucatán. Se trata de uno de los sitios encontrados por los primeros exploradores que visitaron la región Puuc, como Teoberto Maler, austriaco, que llegó a México con el ejército del emperador Maximiliano de Habsburgo, quien tras la caída del imperio, se quedó a vivir en la península de Yucatán.

A él se deben algunos daguerrotipos que documentan el estado que tenían numerosos edificios mayas a finales del siglo XIX y principios del XX. Es el caso de Xcalumkín que fue visitado y reportado por este explorador en ese entonces. La edificación más notable del sitio que se ha denominado el Palacio de los Cilindros, y contó con diez habitaciones y su fachada principal se encuentra en el costado sur del edificio. También se encuentra en el sitio la denominada Casa del Gran Dintel, un edificio de tres aposentos cuya particularidad es un enorme dintel monolítico grabado en dos de sus caras.