Fotos: INAH
La pieza hallada representa a una deidad de la muerte y fue hallada en una pequeña comunidad de Campeche.
En el poblado de Conhuas viven solamente 500 personas. Se encuentra en la ciudad de Campeche, muy cerca de la zona arqueológica de Balamkú y del Tramo 7 del Tren Maya, en donde fue hallada una escultura en piedra de la época prehispánica que representa a una deidad de la muerte.
La pieza fue recuperada por expertos del INAH, Esto lo informó el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, en la conferencia matutina del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador; durante las tareas de salvamento arqueológico que lleva a cabo.
De acuerdo con los análisis preliminares de los investigadores, se trata de una escultura antropomorfa de 25 centímetros, cuyo personaje tiene modificación craneal de tipo tabular erecta, porta una nariguera y un antifaz en el cráneo; además, cuenta con restos de pigmentos en color rojo. Se estima que su antigüedad corresponde al periodo Clásico Temprano (200-600 d.C.).
“Es una figura que por sus rasgos descarnados apela a motivos mortuorios y se vincularía con una deidad de la muerte”, explicó el titular del INAH al abundar que junto con esta escultura se recuperaron tiestos de cerámica policromada.
Sobre los avances en las tareas de salvamento arqueológico en las obras del proyecto ferroviario, Prieto Hernández comentó que en el Tramo 7 se han identificado y resguardado 21,960 elementos inmuebles (entre albarradas, basamentos, nivelaciones y caminos antiguos), de manera que concentra alrededor del 40% del total de los bienes inmuebles localizados y estudiados durante las labores arqueológicas de toda la obra.
“Esto nos habla de la gran densidad de población que hubo en esta región de la península de Yucatán, gracias a una compleja organización social, a la eficacia de la milpa maya y a un sistema urbano que conectaba a diversas ciudades-Estado que comerciaban entre sí, representando a poblados de cientos de miles de habitantes”.
Asimismo, el titular del INAH indicó que en el Tramo 7, ya se dio el 100% del visto bueno de obra, se han recuperado 306 bienes muebles, 72,480 tiestos cerámicos, 64 entierros humanos y se han reconocido 227 rasgos naturales asociados a presencia humana.
Respecto al Tramo 6, donde el visto bueno de obra es de 99.67%, informó que los elementos inmuebles suman 2,907 y los de tipo mueble, 36; además de 62,955 tiestos cerámicos, tres entierros humanos y 21 rasgos naturales.
Sobre el Tramo 5, Prieto Hernández refirió que ya cuenta con el 100% del visto bueno de obra, y se han localizado 8,755 bienes inmuebles, 159 elementos muebles, 28,317 fragmentos de cerámica, un entierro humano y 778 rasgos naturales.
“El Tramo 5 es predominante en este último rubro, ya que las cavernas, cuevas, grutas inundadas o seminundadas y los cenotes resguardan evidencia arqueológica que se remonta a grupos humanos previos a los asentamientos agrícolas, es decir, a cazadores-recolectores seminómadas que habitaron la región desde hace 12,000 años”.
Finalmente, el director general del INAH brindó una síntesis de las acciones que, como parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), se realizan en Tulum, Muyil, El Meco, Xel-Há, Oxtankah, Dzibanché, Chacchoben, Kohunlich y Calakmul, así como en el sitio de Ichkabal, cuya apertura pública se prevé en 2024, y en el Corredor Ecoarqueológico Paamul II.