Foto destacada: INAH
Se trata de un asentamiento maya que pudo estar vinculado al culto de Kukulcán, dios del viento y el agua.
Antes de este nuevo descubrimiento, esta zona arqueológica contaba con seis grupos arquitectónicos y un área con edificios de estilo Petén. Se caracteriza por tener un centro cívico-ceremonial y dos grandes plazas pero todo esto está por reescribirse.
Esto debido a que un equipo de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), identificó y exploró una estructura circular en El Tigre, Campeche; un antiguo asentamiento maya que pudo estar vinculada al culto a la deidad Kukulcán, que en el Altiplano equivale al dios del viento Ehécatl-Quetzalcóatl.
Esto fue informado en ‘la matutina’ por Diego Prieto Hernández, director general del INAH, quien informó que su registro y consolidación derivó de los trabajos del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), dentro de los cuales se han habilitado 1,530 metros de senderos interpretativos y renovado 49 cédulas; además de empezar la construcción de su Centro de Atención a Visitantes (Catvi).
Las labores arqueológicas están dirigidas por Ernesto Vargas Pacheco, y han avanzado 87% para consolidar el edificio compuesto de dos niveles y el cual debió estar coronado por un templo de techo plano. Cabe señalar que en El Tigre se encuentra un basamento similar, y otros de la misma tipología pueden admirarse en Edzná, Becán, Uxmal y Chichén Itzá, por mencionar algunas zonas de la Península de Yucatán.
La importancia de esta estructura arquitectónica radica en su temporalidad, la cual corresponde al Posclásico temprano (1000-1200 d.C.), la más tardía del otrora puerto fluvial, cuando mantuvo intensos vínculos con otras regiones de Mesoamérica, como el centro de México, Oaxaca y la Costa del Golfo, de donde podría haber llegado el culto a Ehécatl-Quetzalcóatl.
De hecho, en el documento virreinal del cacique chontal don Pablo Paxbolón (1575-1576), conocido como Papeles de Paxbolón Maldonado, se menciona que la estructura principal del lugar tenía templos dedicados a las cuatro principales divinidades del Posclásico maya, una de ellas era Kukulcán (advocación maya de Quetzalcóatl), lo que ha permitido al arqueólogo Vargas Pacheco proponer que El Tigre fuese el Itzamkanac de las fuentes históricas, pues estas concuerdan con la localización citada y los datos arqueológicos sobre su identificación.
Con respecto a la aplicación del Promeza en las zonas arqueológicas cercanas a la ruta del Tramo 1 del Tren Maya, que va de Palenque, en Chiapas, a Escárcega, Campeche, Prieto Hernández abundó que prácticamente han concluido las tareas de investigación, conservación y renovación de señalética en Palenque, por lo que cuenta ya con 2,880 metros de senderos interpretativos.
A su vez, se ha avanzado 36% en la reestructuración y actualización del Museo de Sitio Alberto Ruz L’huillier, y ha terminado la construcción del Catvi, donde se celebró recientemente el “Encuentro por una vecindad fraterna y con bienestar”, entre líderes latinoamericanos.
En tanto, en la Zona Arqueológica de Moral-Reforma, en Tabasco, la señalética está renovada al 90% (500 metros de senderos interpretativos y 95 cédulas), y las labores de investigación y conservación tienen 75% de avance.
Asimismo, todas las dependencias del sector cultura federal están abocadas a fortalecer la solidaridad con las y los hermanos de las costas de Guerrero, de ahí que el instituto habilitará temporalmente en el Museo Histórico de Acapulco, Fuerte de San Diego, un centro de operaciones para favorecer la ayuda a la población damnificada por el paso del huracán Otis.